La agresión sufrida por el presidente de Cerro Largo por parte de un hincha de Fénix en Melo, luego del enfrentamiento entre ambos equipos, terminó complicando sin dudas a los albivioletas: el club fue sancionado por la Comisión Disciplinaria de la AUF y tendrá que jugar los próximos dos partidos como local sin sus hinchas en las tribunas.
La dirigencia de Fénix no lo podía creer: el próximo en el Parque Capurro es mañana y nada menos que ante Peñarol. Ya hace varias semanas que los albivioletas anunciaron jugarían en su reducto, y también pensaron que se darían unos 1.300 boletos para los hinchas carboneros, cada uno a $ 1.250.
Mientras esto hizo que los simpatizantes de Peñarol pusieran el grito en el cielo e incentivaran a no concurrir a la cancha pagando esos precios, ayer se confirmó que los hinchas visitantes pagarán solamente $ 100, lo que generó la reacción por todos lados.
Ayer, la Mesa Ejecutiva definió que los hinchas de Peñarol que podrán concurrir al partido serán 800, y que pagarán solo $ 100, basándose en el fallo que sufrió Cerro en su momento. Y en cuestión de minutos los socios carboneros agotaron los boletos disponibles.
Los dirigentes albivioletas no lo pueden creer, ya que no solo no podrán jugar con sus simpatizantes en las tribunas, sino que solo habrá hinchas visitantes, que pagarán muy poco, con lo que no se cubriría siquiera el costo del operativo de seguridad.
“El precio de las entradas se fijó en base a lo que sale el espectáculo. Ahora, nos están penando por partida doble”, remarcaron los directivos del club de Capurro.
Peñarol llegará como líder y con posibilidades de ser campeón, cuando enfrente mañana desde la hora 15.30 a los dirigidos por Juan Ramón Carrasco. Para ello necesitará ganar, y que Danubio no derrote a Wanderers. Fénix, mientras tanto, no puede creer las repercusiones de aquella agresión al presidente de Cerro Largo.
