En una jornada que se realizó bajo techo a raíz de las condiciones climáticas adversas, se celebró en nuestra ciudad el Día Global del Voluntariado Juvenil. De hecho, el festejo se atrasó justamente por la situación climática; “el clima nos volvió a jugar una mala pasada, pero igual”, dijo Cecilia Beceiro, del programa Impulsa de INJU.
El lugar donde se realizó este año la intervención fue elegido por los propios voluntarios. “Una de las ideas era el Hogar de Ancianos, pero se terminó decidiendo por el Hogar de Niños, para dar otra visión. Una de las cosas que queríamos era que la gente viera el movimiento, tuvimos que hacer todo adentro y no se pudo, pero queda la promesa de seguir más adelante”, dijo Beceiro.
VOLUNTARIOS
En Paysandú hay 270 voluntarios registrados, “en realidad hay muchos de los jóvenes que trabajan con nosotros como voluntarios que no están inscriptos, aunque les decimos siempre, y también es cierto que hay voluntarios que se inscriben acá y están estudiando en otro lado, pero hay 270 inscriptos”, señaló la técnica.
Beceiro agregó, no obstante, que “no solo trabajan los voluntarios jóvenes, por eso es difícil decir una cifra, porque trabajan mucho con nosotros también los que ya pasaron los 29 e igual se enganchan siempre en las actividades que hacemos de voluntariado”.
Los voluntarios llevan a cabo una variada gama de tareas. “La semana que viene, el sábado, estamos invitados, como desde hace muchos años, a la Feria de Esperanza, entonces justamente la idea es ir con algunos voluntarios, además con grupos de voluntarios, como los de Hip Hop Paysandú. El año pasado fueron los de parkour, este año todavía no estamos bien seguros porque están medio complicados con el tema estudio, pero estamos seguros que algunos se van a prender también”, detalló.
DESAFÍOS
Además este 2019 estuvo marcado en su inicio por un evento en el que la participación de los voluntarios fue muy importante, como las inundaciones que afectaron nuestra ciudad. “Han hecho también las jornadas de limpieza en la playa; en realidad algunos de los de la Mesa de Representación Juvenil ni siquiera están inscriptos como voluntarios, pero fueron algunos de los que inclusive organizaron las jornadas de limpieza ‘basura challenge’. Hay voluntarios que vienen, que sabían que íbamos a venir acá (al Hogar de Niños) y ya empezaron a venir acá, a hacer juegos y lecturas con los niños. El que está en esto lo tiene como muy asimilado, y realmente se prenden”, afirmó.
Adelantó además que están “empezando a trabajar para hacer un campamento inclusivo con gente sorda; todas son actividades que van surgiendo, a veces por solicitud de alguien, a veces porque a ellos mismos les pica algo y quieren hacerlo, otras veces porque al equipo se le ocurre. A veces alguna institución está haciendo algo y no nos invitó, y vamos e igual golpeamos la puerta”.
Las posibilidades para recurrir al voluntario son infinitas. “Siempre hay cosas para hacer, porque siempre hay alguien que está necesitando una mano. Puede ser ir a hacer una pintada, pueden ser infinidad de cosas que a veces no las nombramos porque no se nos ocurren, pero no quiere decir que uno no esté para hacerlo. Por eso está bueno que la gente, las instituciones, las organizaciones, que piensan, o que necesitan, o que les gustaría, se pongan en contacto, ya sea al Mides directamente, o con nosotros INJU Impulsa a través del Facebook, o en la Casita de la Playa de lunes a viernes de tarde. No importa cómo. Si saben que quieren algo pero no tienen la idea, no importa, a nosotros ideas nos sobran, está bueno que vengan y nos soliciten”.
MURAL
Beceiro destacó que las autoridades de INAU y del Hogar enseguida se sumaron cuando se planteó la iniciativa de realizar la intervención en una de las paredes.
“Vinimos acá a hablar con Elisa Vera, a ver si le gustaba la idea y si le daban la autorización. La idea les encantó enseguida, y cuando se dio la autorización fue todo inmediato. Una de las cosas que queríamos era dar color, hacer un mural. Nos comentaron que si bien tenían uno, la pared de enfrente estaba disponible, y como ellos estaban también con los festejos de los 30 años de la Convención (de los Derechos del Niño), la idea fue venir a trabajar junto a la maestra para que los niños hicieran los dibujos, y después Aída García hizo este collage para armar el mural”, indicó.
La pintura estuvo a cargo de los voluntarios y de algunos de los niños más grandes. “Estuvieron toda la tarde en medio de juegos, canciones, la merienda, maquillaje; pero ha sido todo intervención conjunta entre voluntarios, los niños, los técnicos de acá, los técnicos de Impulsa, ha sido toda una jornada de todos juntos. Nos está quedando pendiente venir en otro momento a completar esto que se había comprometido, queremos venir a hacer jornadas de lectura con los niños, a hacer plantaciones”, agregó.
Además estaba planteado “que vinieran muchos de los chicos de hogares sustitutos, que con el tema del clima no pudieron venir muchos de ellos, pero esto es un puntapié inicial, utilizamos la jornada para después poder generar más cosas”.
