Productor lleva más de 33.500 dólares en pérdidas por quemas intencionales de fardos

Hugo Morales es un productor cuyo principal ingreso es la venta de fardos de alfalfa, negocio al que se dedica desde hace varios años. En el último año y medio, su negocio se ha visto afectado por pérdidas de más de 33.500 dólares debido a incendios que –cotejados por Bomberos– son de origen intencional. Según dijo a EL TELEGRAFO, “se sabe quién es el causante desde el día uno pero la Policía, por la nueva ley, no puede hacer nada”, se lamentó. Sobre los hechos, Morales aseguró que hay una persona plenamente identificada, “testigos de cuando tuvimos un problema (con el supuesto pirómano) y que me sentenció que se las iba a cobrar. Pero nada de eso parece bastar”.
Siempre según su versión, “el año pasado me quemó mil fardos y parecía que se había ido porque estaba todo tranquilo. Ahora volvió a las andanzas. La respuesta que tengo de la Policía, por más que la gente de la parte rural se ha ocupado, es que tengo que tener pruebas. En el caso de anoche (por el martes pasadas las 0), la cámara de seguridad de mi casa grabó el auto que se dio a la fuga después de prender fuego los fardos. Se vio como un vislumbre de la nafta (encendida) y a los siete u ocho segundos pasó rapidísimo el auto, pero no se llegó a ver la matrícula. Pero se sabe muy bien quién es”, dijo.

PROBLEMAS VECINALES

“Se trata de un vecino que se enojó conmigo por una pavada y como yo no le saqué un camión que le quedó enterrado se las agarró así”, comentó a la vez que dio su aprobación de que esta versión fuese contada en este diario. “La primera vez me quemó 300 y pico de fardos en Constancia, después me quemó 500 más en mi casa, en la zona de Avenida de las Américas y la entrada al Paso de las Piedras. El año pasado me venía a quemar uno por semana. Me llegó a quemar uno por uno cuando la máquina los va dejando desparramados. Ahí fueron unos 50 más, con diarios. Y anoche, que se quemaron 160, vino con nafta”, comentó.
La Policía “dice que está trabajando pero parece que no, porque no se llega a nada”. “Lleva 33.500 dólares quemados en un año y poco”, dijo a la vez que comentó que esto perjudica duramente su economía. Pero además del perjuicio en cuanto al dinero, también está el daño emocional. “Uno pasa cansado, en alerta, preocupado, duerme mal. Tenés que estar levantándote todo el tiempo. Hay momentos que no sabés cómo podés llegar a reaccionar y ahí las cosas se pueden complicar. Pero por momentos pensás que tampoco te quedan muchas opciones”, indicó el productor.
Sobre este último episodio Morales destacó que gracias a una vecina lograron salvar algunos fardos. “No nos quemó todo porque una señora que iba pasando por acá en el auto, una vecina, nos avisó. Pudimos salvar unos 60”. Personal del destacamento de Bomberos fue de inmediato al campo y durante dos horas batalló contra el fuego, hasta que logró controlar el incendio y salvar el resto de los fardos.