Un hombre de 65 años falleció a raíz de un aparente problema cardíaco tras desvanecerse en un supermercado de la zona de Plaza Artigas, próximo a las 19 de ayer. Particulares y empleados intentaron auxiliarlo y a la llegada de doctores de emergencia médica se practicaron todas las maniobras posibles para salvarle la vida, pero no fue posible. Sumado a lo delicado del caso, el cuerpo debió permanecer durante más de tres horas a un costado del ingreso al comercio pues, al no ser una muerte violenta, la Policía no podía actuar y –según versiones policiales en el lugar de los hechos– tenía prohibido levantar el cuerpo para su traslado. El doctor de la Emergencia Médica que concurrió a atender el evento constató el deceso pero no certificó la muerte, aclarando que esa tarea le compete al forense de Turno. Consultado por la Policía, el forense indicó que de acuerdo la Ley 19.628, promulgada en junio de 2018, “los médicos que participaron de la asistencia de una persona fallecida están obligados a expedir el certificado de defunción, salvo que se tratara de una muerte de causa violenta o exista sospecha fundada de un delito”, por lo que en este caso no correspondía su presencia.
