Tres casos de tuberculosis se detectaron en la Unidad 16 del Instituto Nacional de Rehabilitación una cantidad considerada “dentro del rango habitual al comienzo del invierno” de acuerdo con una fuente confiable.
Los tres reclusos son de sexo masculino y aunque estuvo en estudio un caso de una mujer, por el momento ha sido descartada. Uno es un “caso importado” desde la Unidad 24 Pense, en Soriano. Este recluso fue primero atendido en el hospital sanducero y posteriormente derivado al Saint Bois, en Montevideo.
Los otros dos, también tras pasar por el Hospital Escuela del Litoral, fueron enviados a la Unidad de Sanidad del Comcar.
Desde que una de las reclusas –hay 14 actualmente en el INR Paysandú, de los 286 encarcelados– es pareja de uno de los hombres con tuberculosis y en la medida que habían mantenido un encuentro conyugal, se consideró la posibilidad de que ella también tuviera tuberculosis, extremo que no se comprobó.
“Es corriente a comienzos del invierno algunos casos de tuberculosis; otros años fueron más y se tomaron otras precauciones”, se dijo a EL TELEGRAFO. Este año, empero, se continuaron con las clases que reciben los internos y los profesores asisten con normalidad al complejo.
De todas maneras, se mantiene en alerta al personal sanitario para detectar posibles síntomas de tuberculosis en otros internos.
