El alcalde de Quebracho Mario Bandera realizó personalmente la reparación de un camino vecinal-rural en San Félix (a 70 kilómetros de su jurisdicción), con maquinaria de ese municipio y tosca trasladada desde esa zona.
Bandera le restó importancia a lo realizado y dijo que “he colaborado en varias otras partes del departamento y nadie dijo nada porque no lo vieron; yo no le doy trascendencia, ayudo adonde puedo”.
En cambio, desde la Intendencia de Paysandú se fustigó su acción, en la medida que él mismo condujo el camión y él mismo trabajó con la retroexcavadora, sin contar con un convenio previo ni un proyecto de trabajo.
Los ediles departamentales Mauro Valiente y Ricardo Ambroa aseguraron que esta noche pedirán un llamado a sala y no descartaron promover su destitución, en tanto los concejales del Municipio de Quebracho Gino Belveder y Emerson Arbelo aseguraron que en las últimas semanas Bandera ha estado utilizando maquinaria y recursos fuera de su jurisdicción.
“NO HAY QUE DARLE TRASCENDENCIA A ESTO”
En la mañana de ayer Bandera condujo el camión IIM 1090 (del Municipio de Quebracho que desde hace unos tres meses tiene roto el GPS), una chata y una retroexcavadora. Se dirigió a las afueras de San Félix. En tanto, desde Quebracho se trasladó un camión con tosca, al parecer realizando más de un viaje. Con esa tosca, el alcalde de Quebracho procedió a recuperar parcialmente un camino de escasa extensión, que se encontraba en muy mal estado. Su accionar no pasó desapercibido ni para vecinos ni para la propia Intendencia de Paysandú.
Al ser consultado por EL TELEGRAFO, Mario Bandera dijo que “recibí el pedido de auxilio de vecinos que no podían transitar por ese camino cuando llovía ni sus hijos concurrir a la escuela. Hablé con Rodrigo de Souza (técnico de la Intendencia), quien me dijo que no tenían maquinaria para destinar a esa zona. Le pedí también unos viajes de tosca de la cantera de Agronomía, pero me dijo que tampoco se podía”.
Ante eso, “tomé la decisión de llevar tosca desde Quebracho y como salgo de licencia me dispuse a hacer el trabajo yo mismo. Tomé en cuenta la necesidad de los vecinos, no otra cosa. A veces no podían salir ni a caballo ni en moto, así que entendí que como la Intendencia no podía, y yo tenía cierta disponibilidad, se podía realizar el trabajo. Y así lo hice”.
“He trabajado en Tambores, en el kilómetro 134 de la ruta 265; en Porvenir; en la zona de Sauce del Queguay; en Lorenzo Geyres. Adonde puedo voy y doy una mano. Entiendo a la Intendencia como una sola cosa. Ojalá hubiera podido solucionar más problemas de la gente”, dijo y subrayó que “no hay que darle trascendencia a esto, lo que importa es solucionar”.
Rodrigo de Souza no estuvo disponible para comentarios.
“BURDA EXCUSA QUE OCULTA OTRO INTERÉS”
Quien sí hizo comentarios fue el director general de Obras, Marcelo Romero, quien subrayó que “con el Municipio de Quebracho –ni con su alcalde– no hicimos ningún tipo de acuerdo. No sabemos en qué zona ha intervenido en San Félix. Lo que es peor, me pregunto qué dirección técnica ha tenido, lo que es clave en todo trabajo vial.
“Llama la atención que venga tan lejos de su municipio cuando en su territorio tiene tanto por hacer, tantas obras inconclusas, tanto camino rural por mejorar o recuperar. La verdad, que venir tan lejos para un camino en beneficio de tan pocos vecinos llama mucho la atención. La Intendencia iba a atender esa zona cuando moviera maquinaria hacia el barrio San Félix, pero no solamente por uno o dos vecinos, que es lo que ha hecho el alcalde Bandera”.
“Hay que trabajar a nivel de prioridades. Pero las prioridades de Bandera no las entiendo. Porque después es quien pide por la falta de recursos para ejecutar obras en su territorio. Resulta que alegremente utiliza el dinero destinado a los habitantes del Municipio de Quebracho a 70 kilómetros de distancia. Es muy llamativo y creo que las motivaciones pueden no ser las mejores”.
“Para mí es una burda excusa y con eso se oculta otro interés. Todos los caminos merecen estar en las mejores condiciones, pero vamos trabajando de acuerdo a un plan, incluso muchas veces apoyando trabajos en los propios municipios que no pueden hacer todo lo que deberían. Pongo por caso el Municipio de Lorenzo Geyres, donde se ha hecho un acuerdo con el Concejo y el de Porvenir, donde se está trabajando por los vecinos”, agregó el director general de Obras.
“HIZO CINCO INTERVENCIONES”
Por su parte, el concejal Gino Belveder informó que “en realidad hizo cinco intervenciones desde el 20 de junio a la fecha” en San Félix. Según mis cálculos recorrió 2.100 kilómetros para llevar 60 metros cúbicos de tosca, trasladar la maquinaria y realizar los trabajos. Utilizó dos camiones, una chata y una retroexcavadora del municipio, que se necesita aquí en nuestro territorio”.
“El alcalde se toma atribuciones que no le corresponden y hace trabajos fuera de jurisdicción sin que se tomen decisiones, porque todo queda cubierto, muy poco se sabe. Por eso me alegro que hoy esto haya salido a la luz. Pero que quede claro, no fue una sola intervención en ese lugar en San Félix, sino la quinta. Y el gasto ha sido enorme, todo pagado desde el municipio de Quebracho”.
Un camión con zorra transportando una retroexcavadora tiene un gasto promedio de un litro de combustible cada 3,5 kilómetros y la retroexcavadora de 15 litros cada hora.
“Tiene una forma de actuar muy particular y alejada de las normas; concurriré a la próxima sesión de la Junta Departamental (hoy miércoles) para denunciar ante los ediles departamentales esta situación”.
“TIENE ALGO QUE TAPAR”
El edil departamental Mauro Valiente aseguró que “este es un atropello más, en este caso totalmente comprobado. Pero es así como trabajan varios alcaldes del Partido Nacional, con claro abuso de funciones. Bandera no puede trabajar fuera de su jurisdicción. Me extraña que quien tiene formación académica –nada menos que como escribano– cometa estos errores, porque es un conocedor nato de las leyes”.
Opinó que “puede haber un pago de favores, por llamarlo de alguna manera”. Le llamó también la atención que Bandera anunciara ayer que desde hoy se tomará licencia porque “ese pedido tiene que pasar por el Concejo, quien tiene que aprobarlo y nombrar sustituto. En el caso de Quebracho la última sesión del Concejo fue el 13 de junio y la del 27 de junio se suspendió por acuerdo de los tres partidos. Pero la del 4 de julio no se concretó”.
Valiente aseguró que “recibí el llamado de vecinos de San Félix, incrédulos por ver al alcalde de Quebracho realizando trabajos viales, sin coordinación de la Intendencia, sin técnicos y sin siquiera un chofer de camión. Parecía el hombre orquesta haciendo todo, lo que obviamente deja en claro que quien hace eso es porque tiene algo que tapar”.
Aseguró que “primero ante la bancada y luego en la Junta Departamental promoveré el llamado a sala del alcalde para que entre otras cosas explique por qué gasta el dinero de quienes viven en su municipio lejos del mismo. Hay un claro abuso de funciones, lejos de sus potestades. Bandera manejando una retroexcavadora lejos de su municipio es algo que no tiene justificación. Hay un tema de transparencia que merece que esto se investigue a fondo”.
PUEDE SER DESTITUIDO
El también edil departamental Ricardo Ambroa fue más lejos aún al indicar que “estamos ante un caso en el que debe estudiarse la destitución del alcalde Mario Bandera. La ley 19.272 habilita eso, en la medida que indica que las Juntas Departamentales tienen sobre los municipios los mismos controles que ejercen sobre la intendencia y que puede aplicar en su ámbito el artículo 296 de la Constitución. Este indica que el Senado puede separar del cargo a los intendentes. Pues bien, en la Junta pueden ser destituidos los alcaldes. Y este es un caso muy claro y concreto”. “Hay una sospecha de uso de interés particular, eso no se puede soslayar”, agregó. Para destituir a un alcalde, la Junta Departamental necesita mayoría especial de 21 votos.