Trabajadores de la distribuidora de antigua Urreta al seguro de paro

En un contexto laboral complejo y con niveles considerados “preocupantes” en materia de desocupación en el vecino departamento de Salto, la empresa distribuidora de los productos Cofuesa (antigua Urreta), los refrescos “U” y el “Agua de la fuente Salto” cerró su depósito y envió a todos sus trabajadores al seguro de desempleo. Si bien está prevista una instancia de diálogo para el próximo 22 de julio en el ámbito de la Dirección Nacional de Trabajo (Dinatra), la Federación de Obreros y Empleados de la Bebida (FOEB) no es optimista sobre lo que pueda suceder en esa instancia, como consecuencia de los hechos consumados que la empresa ya impuso. Incluso no se descarta que en dicha instancia la empresa concrete oficialmente los despidos de los 11 trabajadores, según publicó el portal del Pit Cnt.

ESTABAN NEGOCIANDO
El presidente de la FOEB, Fernando Ferreira, explicó que el anuncio sorprendió a los trabajadores porque se encontraban en pleno proceso de negociación. “En medio de las negociaciones y dentro del marco de acuerdo de los 45 días la empresa bajó la cortina, le otorgó la distribución a otra empresa y enviaron a todos los trabajadores al seguro de paro”. Así las cosas, Ferreira lamentó que en este momento y de manera imprevista “once familias estén sin trabajo” y adelantó que desde la Foeb se mantendrán conversaciones con el Instituto Nacional del Cooperativismo y con otros actores “para que estos trabajadores puedan formar una cooperativa y desarrollar su trabajo de distribución con algunas otras empresas de Salto”. En las reuniones con la Dinatra participaban delegados de los trabajadores y uno de los titulares de la Cooperativa Cofuesa, Jonhy Díaz, asesorado por el abogado César Signorelli.

TUVIERON QUE ENTREGAR EL PREDIO
En abril pasado, y tras cumplirse los 15 años de la cesión que tenían los extrabajadores de Urreta S.A. como forma de cobrar sus despidos, la cooperativa debió entregar el predio en la zona llamada “Agua Salto”, a unos seis kilómetros al Norte de la ciudad, que había sido comprada por un empresario salteño del rubro automotor, también con presencia en Paysandú.
Según trascendió, los cooperativistas –que tuvieron siempre empleados– arrendaron con opción a compra un predio en la avenida Luis Batlle Berres (ex ruta 3 que va hacia la represa de Salto Grande), con agua semisurgente para seguir elaborando los productos, y adujeron problemas para mantener la empresa distribuidora “Cecello”, ya que argumentaron que era deficitaria, y envió al seguro a sus once empleados.
Uno de los cooperativistas de Cofuesa, Jonhy Díaz, dijo a diario Cambio de Salto que la situación de la distribuidora “se hace insostenible”, ya que solamente distribuye en la ciudad de Salto y ha generado pérdidas mes a mes, que “Cofuesa no puede seguir bancando a la distribuidora de Salto”y que “la empresa trabaja con 17 departamentos del país, si bien todos los distribuidores se han abastecido por este período en el cual Cofuesa no está produciendo. Va a llegar un momento que estarán necesitando la mercadería, por lo tanto muy pronto debe tener el producto en condiciones para entregarla”.

UNA HISTORIA COMPLICADA
Desde el cierre de la vieja Urreta S.A. en la década de 1990, los antiguos trabajadores continuaron con la producción de agua mineral gasificada y refrescos con sabores cítricos. Sin embargo, debieron crear otras marcas, ya que las originales habían sido compradas por una empresa del Este, directamente competidora.
Una veintena de cooperativistas continuaron la producción en el predio del paraje Agua Salto, hasta que años después hubo diferencias y algunos cooperativistas se retiraron creando una nueva empresa y haciendo productos similares con una marca también similar.