“Apuntamos a llegar al Preolímpico de la mejor manera”

Hace un par de años sufrió cuando se llevó por delante el espigón que separa la playa Park con la del Remeros. El río crecido impidió verlo, y Maximiliano Paccot sufrió los golpes y la rotura de la malla.
El sábado esto fue solo un recuerdo: logró sin inconvenientes el Cruce del Río Uruguay, en lo que fue el inicio de la temporada para el nadador del Campus de Maldonado que apuesta todo al Preolímpico del presente año.
Multicampeón en el ámbito nacional y representante celeste en diferentes competencias internacionales, dijo tras la competencia que “esta travesía es un espectáculo”, y remarcó que “la gente es increíble con su recibimiento”. Y también mencionó que, atento a que el río no presentaba complicaciones, la planificación fue simplemente “llegar a la primera boya oficial y apuntar directo a la meta”.
Así, Paccot se mostró más que feliz porque “arrancamos bien el año y más allá del primer puesto estoy conforme con el rendimiento, sobre todo pensando en que ya se viene, lo fuerte”.
Es que, según indicó, “el 8 de febrero tenemos una etapa de la Copa del Mundo, sobre 15 kilómetros, y luego ya a principios de abril está el Sudamericano de mayores, al que vamos a intentar clasificar en la temporada de aguas abiertas”. Pero, sin dudas, el enorme objetivo es “el Preolímpico que se disputará en mayo, por lo que apuntamos con el equipo a llegar de la mejor manera”. “En realidad se tratará de una especie de repechaje, porque en el Mundial ya clasificó la elite. Y quedamos 15 nadadores por clasificar, así que espero poder estar allí”.
Como es de imaginar, “será pelear a un nivel importantísimo, porque después de Europa, Sudamérica está fuertísimo y es una potencia en aguas abiertas”.
Para intentar llegar con chances, la idea es entrenar en el exterior. “Me tengo que ir a hacer la preparación afuera, espero el mes previo poder irme a Colombia para trabajar allá, a donde fui el año pasado para el Mundial de aguas abiertas. La experiencia fue muy buena y dio resultado, porque entrenar en la altura de brinda una capacidad aeróbica imporantísima, nadé siempre con aire sobrado y eso que fue para prepararnos para los 5, 10 y 25 kilómetros, distancia a la que nunca había llegado”.