El futuro ministro de Ganadería, Agricultura y Pesca, ingeniero agrónomo Carlos María Uriarte, confirmó en la víspera, tras reunirse con el presidente de la Cooperativa Nacional de Productores de Leche (Conaprole), ingeniero agrónomo Alvaro Ambrois, que se evalúa la posibilidad de que el gobierno uruguayo pague la deuda que Venezuela mantiene con la industria, para luego tratar que el gobierno de Nicolás Maduro abone ese monto, aclarando que “es uno de los temas que está sobre la mesa”.
Al tiempo de acotar que “ya lo hemos hablado incluso con la próxima ministra de Economía”, dijo que se manejan “varias opciones” mediante las cuales realizar este pago, pero agregó que “a nuestro entender es un reclamo lógico, justo, porque el gobierno saliente tuvo una responsabilidad muy evidente de por qué se hizo negocios con Venezuela, y por lo tanto creemos que es un tema que debemos analizar con mucha seriedad”.
Ambrois por su parte, dijo que “la deuda está documentada y existe. Venezuela como tal tiene esa deuda, así que alguien en algún momento se deberá hacer cargo”.
“Nosotros lo que hemos planteado es lo mismo que le hemos planteado al actual gobierno. Es decir, tenemos un crédito, qué bueno sería que nos adelantaran ese crédito y que en su momento el Uruguay lo cobrara”, comentó el presidente de Conaprole.
Señaló que “está claro que la deuda existe y en algún momento el país se va a hacer cargo. Señales no hemos tenido, simplemente hemos planteado la situación”.
Como se recordará, en julio de 2015 los gobiernos de Uruguay y Venezuela anunciaron un acuerdo que permitía la venta de 265.000 toneladas de alimentos nacionales al país caribeño por un total de U$S 300 millones.
El acuerdo –que contemplaba la venta de 120.000 toneladas de arroz, 44.000 toneladas de leche en polvo, 80.000 toneladas de soja, 9.000 toneladas de pollo y 12.000 toneladas de queso–, fue calificado en aquel entonces por el presidente Tabaré Vázquez como “oxígeno puro” para Uruguay.
Bajo este paraguas varias empresas de alimentos uruguayos realizaron exportaciones a Venezuela, pero hasta el día de hoy Conaprole –la empresa láctea más grande del país y una de las que envió productos a la nación caribeña–, espera cobrar por parte de las ventas que hizo. La deuda asciende a U$S 30 millones.
EXPECTATIVA POR PRECIOS
El presidente de la Asociación Nacional de Productores de Leche (ANPL), Walter Frisch, expresó tras reunirse con la cúpula máxima de la Cooperativa Nacional de Productores de Leche (Conaprole), que “se espera que el precio se refleje en el cierre del mes, que los números den y pueda haber algún aumento. Estamos esperanzados en eso”.
En la reunión se trataron temas como clima sindical, mercados tanto internos como externos, además del funcionamiento de las medidas de ahorro y austeridad que se aplican a pedido de los tamberos.
Quedó ya confirmado que el centro de distribución que se mantendrá en la planta de San Carlos será por un año, y los empleados que van a ir a distribución de otras plantas y cuales se dan de baja ya quedaron definidos.
Conaprole explicó allí que el mercado interno está igual, con ventas estables y no se recupera de la caída del 12% en los últimos años.
En lo que refiere al ámbito internacional, se informó que la cooperativa está vendida y con poco stock, y no se copiaron las últimas bajas de Fonterra, por lo que hay estabilidad en los mercados.
REMISIÓN
El Director de Conaprole, Gabriel Fernández, se refirió a la situación actual y el comportamiento de la remisión en el mes de enero.
En diálogo con IT Lechería, sostuvo que “climáticamente en general viene bien, salvo el este del país que está complicado, también parte de Canelones, pero en términos generales ha mejorado, gracias a las lluvias de fines de diciembre y principios de enero”.
Esto ha determinado que la remisión esté igual a la del año pasado, “y entiendo que las perspectivas son buenas y el estado de los ganados para los partos de otoño es bueno”.
Acerca de las perspectivas, dijo que “se espera mejorar en el mes de febrero por varios factores, pero viendo cómo se viene comportando enero, que empezó abajo y luego repuntó, vamos a tener una producción en el segundo mes por encima del año pasado y a partir de ahí si nos acompaña el clima, vamos a tener mayor producción en el otoño”.
