Un hombre de 46 años permanece a disposición de Fiscalía de Turno al ser detenido por pretender atropellar a dos policías durante su huida desde una finca donde se había originado un altercado por violencia doméstica. El hecho, que ocurrió cerca de la medianoche de la víspera, requirió de la intervención de efectivos de varias reparticiones y culminó luego de que GRT efectuara dos disparos intimidatorios al rodado del sujeto para que depusiera su actitud.
De acuerdo a información recogida por EL TELEGRAFO, próximo a las 23.40 del lunes mediante un llamado recibido por el Centro de Comando Unificado Departamental (CCUD) se pidió la presencia policial en una casa de las inmediaciones de Instrucciones del Año XIII y Solano García. Desde allí se alertó que había ocurrido un incidente entre una mujer y un hombre, y que en la finca podría haber algún menor de edad.
Al lugar se dirigió un móvil de la Unidad de Respuesta Policial en que iban un agente de 28 años y una cabo de 42 años, que estaban recorriendo la ciudad. Al arribar al barrio, los uniformados ingresaron a una calle interna , ocasión en que vieron una camioneta blanca con el motor encendido y una persona dentro. Se acercaron para preguntarle por el número de la casa que buscaban, instancia en que el conductor del rodado –identificado luego como C.E.L.B– aceleró e intentó atropellarlos. Los policías, en tanto, tuvieron que tirarse hacia el costado para evitar ser chocados. De inmediato, dieron aviso de lo ocurrido al CCUD a la vez que solicitaron refuerzos para seguir al rodado.
HUYÓ A ALTA VELOCIDAD
El hombre huyó por Instrucciones del Año XIII en dirección al oeste. En tanto, otros dos uniformados –que escucharon de la situación y estaban cerca– tomaron la posta en la búsqueda del insurrecto.
Una vez que divisaron la camioneta Chevrolet Montana, que iba por Joaquín Suárez al norte, le dieron seguimiento. Durante ese recorrido, los policías notaban que el hombre continuaba con la misma actitud y haciendo peligrar la vida de particulares a quienes cruzaba o transitaban por la vía pública. En todo momento, los efectivos le dieron la voz de alto, utilizando para ello el megáfono del patrullero y llevando las luces superiores encendidas, pero el hombre aceleraba cada vez más para tratar de perderlos de vista.
Tomó por calle Yapeyú al oeste donde fue interceptado por los policías a quienes había intentado atropellar, quienes le dieron la voz de alto en la rotonda de bulevar Artigas, pero hizo caso omiso. Luego se dirigió por ésta hacia el sur y pasó a escasa distancia de efectivos del Grupo de Respuesta Táctica que estaban apostados en puntos de bloqueo en las calles Purificación y Andresito. En todo ese tiempo, el hombre condujo sin prestar atención a terceros que lo hacían sin conocer la situación, es decir poniendo en riesgo sus vidas y pudiendo desatar un siniestro con graves consecuencias.
Al llegar a la zona de bulevar Artigas y Juan Carlos Henderson, era esperado por tres motocicletas del GRT que estaban apostados haciendo el corte de calle. Al verlos, el hombre prosiguió con la marcha rápida y trató de embestirlos, debiendo los uniformados resguardarse para evitar ser lesionados.
En todo momento, los policías intentaban decirle a las personas que circulaban que detuvieran la marcha en procura de salvaguardar su integridad. En tanto, el sujeto continuó la marcha por avenida Salto al oeste hasta llegar al Obelisco, recorriendo ese trayecto a una velocidad superior a 100 kilómetros por hora.
Desde el Obelisco tomó por Baldomero Vidal al norte, circunstancias en que un efectivo del Grupo de Respuesta Táctica efectuó dos disparos con su arma de reglamento hacia la rueda trasera izquierda de la camioneta para que el conductor disminuyera la velocidad. Uno de los disparos dio en la rueda y otro arriba del paragolpe trasero.
Sin embargo, pese a la acción del uniformado, C.E.L.B siguió la marcha y dobló en Juan Carlos Henderson al Este donde finalmente fue interceptado por dos móviles, lográndose la detención del sujeto –que debió ser reducido– a unos 30 metros de la intersección con calle 33 Orientales.
Al cotejarse los datos de la persona a través del sistema de gestión en seguridad pública se supo que había un pedido de requisitoria de la Jefatura de Río Negro por una denuncia de amenazas en Young.
Se hizo presente personal de Policía Científica a fin de realizar el relevamiento de rigor, así como se lo sometió a la prueba de espirometría que arrojó 2,570 gramos de alcohol por litro de sangre. Del hecho se dio conocimiento a la Fiscalía de Cuarto Turno que resolvió que el hombre permaneciera detenido hasta lograr evaluar todas las evidencias para formalizar.
