“El Fondo de Desarrollo (Fondes) ya a partir de 2015 ha cambiado el enfoque inicial, pero arrastra una cartera de pérdidas de gran volumen por financiar proyectos y asistencias que fueron una “vela prendida al socialismo”, en tanto la nueva administración apunta a transformarlo en un instrumento de gran proyección para el desenvolvimiento de emprendimientos que generen fuentes de empleo genuinas”, destacó a EL TELEGRAFO el presidente del Inacoop-Fondes, Martín Fernández.
Señaló el jerarca que “recibimos el gobierno el 1º de marzo con un 10,5 por ciento de desocupación, y con 48.000 personas en el Seguro por Desempleo. Por supuesto que todo esto de la emergencia sanitaria disparó más los números, pero ya veníamos con una situación muy deteriorada en el mercado laboral”.
Asimismo destacó las herramientas que tiene el Inacoop (Instituto Nacional del Cooperativismo) “en cuanto a la posibilidad de asociarse, en instrumentos asociativos como las cooperativas, tanto para generar empleos como para formalizar trabajos que hoy existen y que se dan en la informalidad del mercado laboral. Tenemos algunas herramientas básicamente de formación, de acompañamiento, de asistencia a la hora de formarse como cooperativa, de tener acceso al crédito para reconvertirse”.
Consideró que “hay muchas cooperativas que tienen la necesidad de hacerlo, por ejemplo porque venían trabajando en determinado rubro y surge la oportunidad en algo que no es específico de lo que hacían, pero que entienden aparece como un alternativa válida para desarrollar en el mercado laboral. Con esas herramientas nosotros podemos ayudar para la reconversión”.
A su vez, en cuanto a los recursos disponibles, “tenemos un fondo rotatorio con el que atendemos entre otros aspectos créditos puente para atención de proveedores, mejoramiento de tasa, para acceder a pequeñas inversiones, y paralelamente tenemos la herramienta del Fondes, que es un muy buen instrumento, básicamente para aquellos emprendimientos que necesitan hacer una inversión. Por supuesto tiene que estar garantizada como corresponde, tiene que tener su proyecto viable, con un flujo ya previsto, con el respaldo de garantías, pero que es a tasas preferenciales, vinculado a procesos asociativos, y fundamentados en la inversión y el desarrollo”.
CAMBIO DE CARTERA DEL FONDES
Respecto al Fondes subrayó Fernández que “creemos en la herramienta. Desde el año 2015, cuando cambia la gestión y está mucho más parametrizado en cuanto a su funcionamiento y hacia donde pueden ir direccionados los rubros, ha cambiado notoriamente su cartera. Estaba enfocado en cinco o seis procesos que se llevaron 65 millones de dólares de pérdidas, es decir, con un retorno que no existió, y de esa cartera muy pesada hoy sobreviven dos proyectos que están saliendo adelante, que han llegado a un repago interesante de su deuda, como son los proyectos de Funsa y la cooperativa de transporte Sucot en Montevideo, que han reperfilado su deuda y están cumpliendo”.
Apuntó el entrevistado que “tenemos un problema que tenemos que encarar en su momento y que es el de Envidrio, que es una empresa con un pasivo muy importante, del entorno de los 48 millones de dólares, y que hoy en día ni es una solución laboral para los trabajadores que allí están, ni es una solución para los uruguayos que no van a poder cobrar hoy en día –si esto sigue así–, un solo peso de los casi 20 millones de dólares que puso el Estado”.
“Es uno de los temas que tenemos en carpeta para redireccionar, pero hoy la cartera del Fondes es sana, vinculada a emprendimientos cooperativos, muchos de los cuales son cooperativas agrarias, y en los últimos años ha dado inclusive superávit, por lo cual la realidad del Fondes hoy no tiene nada que ver con aquella ‘velita prendida al socialismo’ que había instaurado el expresidente (José Mujica).
Acerca de la forma en que interactúan el Fondes y el Inacoop expresó Fernández que “el Fondes en su origen dividió en dos los fondos para el desarrollo: uno fue a la Agencia Nacional de Desarrollo (ANDE) donde tiene los préstamos para pymes, sociedades comerciales y la otra cartera al Fondes, que es el Fondes-Inacoop, que atiende a procesos asociativistas como cooperativas, empresas recuperadas por los trabajadores y demás”.
“Tiene una gobernanza en la que los mismos integrantes de Inacoop son los representantes en Fondes, y a nivel social tiene representantes de Cudecoop (Confederación Uruguaya de Entidades Cooperativas) y del Pit Cnt a través de la Asociación Nacional de Empresas Recuperadas”, destacó.
Consultado sobre los pasos que en la práctica tienen que dar empresas y otros nucleamientos interesados en obtener financiación y asistencia técnica para sus proyectos, explicó que “básicamente de lo que se trata es de acceder al instituto y por eso nosotros consideramos importantísimo tener en el interior del país referentes territoriales que puedan acercar esa información, que puedan ser el primer recurso donde golpear la puerta para no tener que terminar en la Ciudad Vieja de Montevideo, como lamentablemente tienen que terminar hoy en día. Esa es la intención que nos lleva a instalar aquí en Paysandú un referente territorial y de esa manera con el instituto y con el Fondes, se hace una evaluación del proyecto, de su viabilidad y de la capacidad de repago que pueda tener ese emprendimiento”.
Hizo énfasis además en la necesidad de que las cooperativas “internamente asuman que son empresas cooperativas, empresas que tienen que perfeccionar su gestión, que están en un mercado de competencia, que están en un mercado cada vez más dinámico y que tienen que actuar justamente como empresas, porque solo a través del mejoramiento de la gestión pueden tener éxito en el mercado actualmente”.
