No hay apuro, pero se piensa en el cambio

En el Complejo Collares, reducto de Bohemios, se ha trabajado de buena manera en el terreno de juego.

Hay varias realidades en el fútbol sanducero. Están los que no tienen muchas ganas de jugar, los clubes que apuraron el tranco y ya están entrenando pese a las recomendaciones, y los que aguardan por novedades.
Lo que está claro es que hoy hay un aspecto en el que los clubes están aliviados: no pierden dinero, porque no deben correr con los insoportables déficits de los fines de semana. Igual, lógicamente, “hay gastos fijos que cubrir”, dijo el presidente de Bohemios, Daniel Vernengo, quien igualmente sumó que “se han llevado al mínimo”.
Mientras se mantiene y arregla el Parque Firpo, en el club no hay apuro para volver, porque “primero se debe resolver la emergencia sanitaria”, y se afirmó a la idea de que “todo esto trae un cambio importante que nos llevará a jugar en meses que ya no tendremos frío”, una vieja aspiración de varios clubes. Cruzando la calle, en Independencia, también se respira en cuanto a que no hay déficit. “¿Si perdemos plata? No: perdemos plata cuando jugamos”, dijo Robert Romero desde su faz de dirigente, aunque reconoció que “se está haciendo difícil para cubrir los gastos fijos, porque no hay ingresos por beneficios y la situación económica que vive la gente”.
Pero reafirmó que “perder plata no se pierde, porque pagamos déficit todos los fines de semana en todas las categorías”.
Los bifranjistas intentan ir acomodando el escenario deportivo en la medida que se puede. “Mejoramos alguna cosa, la pintura, arreglos en los vestuarios para ganar tiempo”, dijo. Pero todo apunta, al igual que sus vecinos de Bohemios, a que finalmente se pueda cambiar la pisada y probar la experiencia de jugar a la noche, por lo que se intentará mejorar la red lumínica.
“Esta es la oportunidad de probar y cambiar, jugar el Apertura de octubre a diciembre y en el verano el Clausura. Se habló de preparar las canchas a disposición con luz, hacer un relevamiento para ver qué le falta a cada cancha para estar en condiciones y que estén listas para jugar en el verano”, se explayó.
Pero igual, no hay apuro. “Jugar queremos jugar, pero hay que estar seguros porque después no se podrá volver para atrás”, indicó el dirigente de Independencia.