Entre los protocolos y las ganas de volver al escenario

La reunión convocó a artistas escénicos y plásticos, periodistas y dueños de salones, que analizaron la problemática del sector.

En el local del Sindicato de Obreros y Empleados de Norteña (Soen) tuvo lugar una reunión convocada por la Asociación de Artistas y Trabajadores Afines de Paysandú (Adata), con la finalidad de analizar la compleja situación que atraviesa el sector cultural y buscar alternativas para retomar sus actividades, interrumpidas por las medidas sanitarias que se decretaron para impedir la expansión del COVID-19.
“Lo que motivó esa reunión fue la preocupación que tenemos en torno a lo que está pasando con el sector cultural”, dijo Gastón Alza, vocero de Adata. “Por un lado, vemos que se predica la necesidad de crear protocolos y demás, por el tema del COVID-19, para cubrir la parte sanitaria. Por otro lado, vemos que en diferentes ciudades del Uruguay, e incluso en Paysandú mismo, hay actividades, bailes y aglomeraciones, sin autorización ninguna. Por eso, citamos a todos los partícipes a esta reunión –entre los cuales hubo músicos, responsables de salones de fiesta, periodistas, artistas plásticos, murguistas– para ver qué perspectivas hay y cómo avanzamos. Y también para comprometer a las autoridades locales, que ya hace un tiempo se habían comprometido a controlar ésto”.
El momento actual es “de una gran preocupación e incertidumbre” para los trabajadores del arte y la cultura, continuó diciendo Alza, para luego cuestionar alguno de los modelos de protocolo que se han dado a conocer. “Está todo bien con los protocolos, y nosotros queremos hacer las cosas bien. Pero también vemos que esos protocolos son limitantes para nuestro arte, afectan directamente nuestra expresión. Por ejemplo, limitan la cantidad de gente que puede haber arriba de un escenario, con límites que no tienen sentido común, ni criterio. Permiten que haya solamente 4 músicos sobre el escenario, o dos voces activas. Si nos ponemos a pensar, y lo comparamos con un cuadro de fútbol –que ya están practicando–, o con un baile de los que se arman, es prácticamente un bozal para los músicos. Porque nadie más cumple con ese criterio, digamos”.
De todas formas, Adata viene trabajando para elaborar un protocolo, “porque desde el principio el sector quiere hacer las cosas bien, como corresponde. Nos hemos asesorado, y recientemente creamos un equipo de personas que están capacitadas para crear y argumentar un protocolo para el escenario. Al parecer, lo que compete a los artistas es un protocolo escénico, en el cual la dimensión del aforo determina la cantidad de personas que van a estar en el mismo”. Este protocolo viene a sumarse a otros “realizados por la parte de los locales –sea pubs, teatros o lo que fuere–. Eso también es contraproducente, porque al no haber una férrea comunicación con quienes crean ese protocolo o lo habilitan, nuestro protocolo puede llegar a tener contradicciones con el que tenga un local. Es un tema bastante delicado de abordar. Estamos en ese proceso”.

“SOMOS CULTURA”

Por otra parte, Adata trabaja intensamente en la organización del festival online Somos Cultura, que llevará adelante con el apoyo de la Intendencia de Paysandú, y que ha sido declarado de Interés Departamental por la Junta Departamental. La propuesta reunirá a más de 20 propuestas artísticas sanduceras, que se presentarán el 25 y el 26 de julio en el Florencio Sánchez y en el Espacio Cultural Gobbi. “Como decía antes, la idea fue tratar de adaptarnos a las circunstancias de la actualidad y respetar las normativas.
Por eso se planteó la idea de hacer un festival online, sin público, con la participación de una gran cantidad de artistas sanduceros, referentes y emergentes, con música, danza, y una gran variedad de géneros”, explicó Alza.
Con estas dos jornadas artísticas se busca poner en marcha un movimiento cultural “que permita visualizar la existencia de los trabajadores organizados de Paysandú en el ámbito cultural, en el cual nos proponemos y hacemos las cosas como sea, a como dé lugar. Y más teniendo en cuenta estas circunstancias críticas, y muy tristes, que estamos viviendo. Más allá de lo económico la tristeza también es social, porque hemos perdido el contacto humano con nuestro público, amigos y familia, que siempre están haciendo ese aguante invalorable en cada actuación”.
El festival podría disfrutarse en vivo por televisión a través Canal 4 (Cablevisión y Vera TV), Canal 135 (Telecable HD); por YouTube, a través de Efusiva TV; por Facebook, en los sitios de Efusiva TV, de la Dirección de Cultura de la Intendencia, y por las redes sociales de cada uno de los artistas.