La Sociedad de Criadores de Aberdeen Angus del Uruguay, dio a conocer el listado de las mejores cabañas del año 2019, y por segunda vez en los últimos cinco años, cabaña “La Acacia” de Octavio Martigani y familia se ubica en el podio, quedando en tercer lugar entre las mejores cabañas del país.
“Nos tomó realmente de sorpresa porque no es un objetivo que lo tengamos planteado, sí pretendemos tener la mejor performance con la genética que tenemos, pero la noticia nos trajo una alegría enorme”, señaló a EL TELEGRAFO Octavio Martigani (h).
Reconoció que atrás “hay un trabajo de muchos años y todos los días del año, y esto gratifica, porque ser terceros con tantas cabañas prestigiosas y de muchos años de trabajo, y además estar en los últimos cinco años entre las cinco mejores, nos entusiasma y enorgullece”, dijo.
También fue llamativa la paridad entre las tres mejores cabañas. Primera fue Sociedad Ganadera El Yunque de la familia Albanell con 445 puntos, segundo Jacques Grumbacher de cabaña La Competencia con 440 puntos, y tercera La Acacia de Octavio Martigani, con 438 puntos.
La familia Martigani está conformada por Octavio (padre) y Martha Santos, junto a sus hijos Octavio (sus hijas Valentina y Luana), su compañera Laura Esteves, Victoria y Gustavo Martigani Santos.
Sobre el inicio del trabajo en genética, Octavio recordó que “fueron muchos años de estudio y análisis”. Cuando todavía se criaba Normando “ya pensábamos en incursionar en el Angus. Después con la crisis lanera en el año 1992 empezamos a hacer el giro”. Aunque aclaró que en la década del 30, “en la época de mi abuelo se criaba Angus”.
Explicó que “en estos campos bastante marginales en los que estamos, de aptitud forestal, ahí se vio la gran diferencia y las bondades del Angus”.
Al principio del retorno del Angus a La Acacia, “se dijo que no se haría cabaña, sino que producción general, y cuando quisimos acordar, papá que es un tipo visionario y le gusta hacer las cosas bien y apuntar a más, se compran en el año 2005 las primeras 5 vacas de pedigrí y ahí comienza la historia del plantel y la cabaña”.
En el año 2007 se fue al Prado “a mirar las filas en la muestra de la raza, en tanto ya estábamos criando unos terneros. Nos lanzamos al agua y al año siguiente preparamos tres animales y fuimos por primera vez al Prado”.
Octavio, quien dejó su trabajo en Montevideo y decidió venirse a trabajar a full en La Acacia, dijo que “no era fácil venir cada 15 días a la estancia”, recuerda, “pero un día puse en la balanza y analicé lo que realmente quería y decidí hacer ese giro, por el cual estoy más que satisfecho de haberlo realizado”.
Sostiene que junto a su hermana Victoria “hacemos un equipo que hace todo más fácil para trabajar, y nos retroalimentamos, porque yo tengo mi impronta y ella su fuerte, complementándonos bastante para llevar esto adelante”.
MÁS QUE MERECIDO
El ingeniero agrónomo Gonzalo Indarte manifestó que “es una familia muy trabajadora, que está todos los días del año detrás de los animales, además de ser excelentes personas, y que el premio es más que merecido”.
El director de Indarte y Cía. indicó que “nos llena de orgullo llevar adelante sus subastas anuales, y acompañarlos durante todo el año en los negocios que realizan, pero nos encanta que sea gente de nuestro departamento, y que es una familia que es todo un ejemplo, y en donde todos tiran a la par”.
