El Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa), actualizó ayer su mapa referido a la ubicación de la manga de langostas y emitió una señal de peligro para alertar a los productores de Corrientes y Entre Ríos, mientras los insectos se acercan a nuestro país.
El veranillo que se ha instalado en esta zona de Sudamérica ha permitido que las langostas comenzarán a volar por más horas (lo hacen con temperaturas por encima de los 23 grados), y cuando se pensaba que lo harían hacia el norte, se han desplazado este fin de semana rumbo al sur, ingresando a la provincia de Entre Ríos, proveniente de Corrientes.
A pesar de que en la última provincia citada se han realizado diversas aplicaciones con el fin de combatir la plaga, se estima que la misma sigue siendo de importantes dimensiones, y que se desplaza si el viento es a favor, es decir más de 100 kilómetros en un sólo día.
Precisamente en la última ubicación de la víspera se detecta que la manga de langostas está a poco menos de 100 kilómetros de la frontera de Uruguay, a la altura del departamento de Artigas.
Los equipos destinados a tener un relevamiento de la situación, que dependen del Senasa, han venido realizando un tratamiento fitosanitario para bajar la densidad poblacional de la manga de langostas ubicada en el Departamento Curuzú Cuatiá, en la provincia de Corrientes.
En nuestro país, el Ministerio de Ganadería, Agricultura y Pesca (MGAP) anunció que está activo un Plan Nacional de Vigilancia contra la langosta.
