Interrogando documentos en el Centro Daniel Vidart

El centro de documentación e investigación Daniel Vidart hizo su estreno en un día del Patrimonio, a menos de un mes de su apertura, con una propuesta orientada a dar a conocer cómo se trabaja en la institución. Más allá que permaneció abierto durante varias horas a lo largo del sábado, la actividad central fueron dos talleres denominados “Aproximación a los documentos históricos de Paysandú”.
“Se trabajó con tres documentos diferentes, documentos asociados a la vida de Paysandú, uno de 1833, de la Junta Económico Administrativa, en sus primeras épocas, de las primeras horas de esa institución, otro de 1852, que es ni más ni menos que el contrato que firma la Junta Económico Administrativa con Juan Torres, para amurar el predio del cementerio público, que era en aquel entonces el Monumento a Perpetuidad”, dijo a EL TELEGRAFO Alejandro Mesa, coordinador de Museos Departamentales. Otro de los documentos fue una circular del 20 de setiembre de 1884, “un aviso, también dirigido a los miembros de la Junta Económico Administrativa, invitando a los funcionarios y a la ciudadanía, a celebrar una misa entorno a la figura de José Artigas, en Paysandú”, con un acto en la Jefatura y una misa en su honor.
Mesa explicó que con esta propuesta “lo que se hace es despertar el espíritu crítico entorno a los documentos, porque los documentos no hablan por sí solos sino que hay que interrogarlos, hay que buscar formas para hacerlos decir otras cosas, que a veces están en el documento y a veces no”.
Lo que se hace es un cruce de variables, “con otro tipo de fuentes, fuentes secundarias como pueden ser bibliografías, acceso a datos biográficos de personajes históricos, o también fuentes iconogáficas, como es el caso del Monumento a Perpetuidad, donde se usa por ejemplo una reproducción de la acuarela de Francisco Vincent, del año 1846, contemporánea a la construcción del amuramiento, del contrato celebrado para esos fines”.
A partir de allí “la idea es poner a funcionar las interrelaciones y las articulaciones que puede haber entre diferentes tipos de fuentes. Ya sean fuentes escritas o estudios, tratamientos bibliográficos, con una bibliografía específica o con fuentes iconográficas. La idea es que la gente pueda acceder a las posiciones, a las posturas y a los aspectos que denotan los documentos, que persiguen los documentos, pero además pensar en qué tipo de preguntas le podemos hacer, qué datos nos revelan, qué nos pueden aportar para la construcción histórica.