El Congreso de Intendentes resolvió prorrogar nuevamente la vigencia de las libretas de conducir de aquellas que caducaron al 31 de enero de 2020, hasta el 31 de diciembre de 2021, por las condiciones de pandemia. Algo que decidió por primera vez meses atrás a raíz de la emergencia sanitaria por el COVID-19. De esta manera, según la resolución, los permisos cuya vigencia caducaron después del 31 de enero de 2020 se considerarán vigentes hasta el 31 de diciembre de este año.
Se mantiene el requisito que se deberá tener un “certificado de aptitud para la conducción de vehículos expedido por una institución habilitada y en el cual se indique la vigencia por la que deberá expedirse el permiso en oportunidad de su renovación de acuerdo a los criterios médicos establecidos por las reglamentaciones vigentes”, indica la resolución.
Por otro lado, se plantea que “cuando los titulares de los permisos de conducir presenten, en oportunidad de realizar el trámite de renovación, el certificado de aptitud médico para la conducción de vehículos expedidos por la institución habilitada o el carné de salud laboral, en el que conste la vigencia por la que deberá expedirse el permiso, las intendencias no exigirán ningún otro examen, independientemente de su edad o la pre-existencia de patologías”, se añade.
Esta resolución extiende ocho meses la vigencia, desde que en setiembre pasado se había prorrogado hasta el 30 de abril.
INTENDENCIAS ESTIMARÁN GASTOS POR PANDEMIA
El intendente de Salto, Andrés Lima, pidió oficialmente en el plenario del Congreso de Intendentes que se contemple a las intendencias en el Fondo Coronavirus. Esta iniciativa ya había sido planteada por varios intendentes a diferente nivel, incluyendo el de Paysandú, Nicolás Olivera.
“Cuando se creó el Fondo Coronavirus, no se tuvo en cuenta a las intendencias, pero hoy las circunstancias cambiaron, y es necesario considerarlas como beneficiarias de parte del Fondo, por el rol protagónico que han tomado en la lucha contra la pandemia”, dijo Lima.
Señaló además que “desde los primeros días de diciembre, cuando desde el gobierno nacional se citó al Congreso de Intendentes para pedir la colaboración de los gobiernos departamentales, las intendencias han tomado un rol protagónico muy fuerte, más allá que, desde que se declaró la emergencia sanitaria en el mes de marzo, cada Intendencia ha venido trabajando en el tema”.
Entre las inversiones realizadas por todas las intendencias del país, según lo que dijo Lima, se cuentan “la colaboración con los merenderos y ollas populares, el respaldo a las departamentales de Salud; vehículos, combustible y horas extras de funcionarios, para evitar aglomeraciones y hacer cumplir las demás medidas contra la pandemia; y ahora se viene todo el apoyo logístico para los centros de vacunación”. En el caso de departamentos como Paysandú y Salto se agregan “la asistencia que se da a los refugiados en los departamentos de frontera es otro problema”.
Tras aprobar la propuesta, se determinó que hasta el 28 de febrero las intendencias tienen tiempo para detallar tareas concretas que se realizan vinculadas a la pandemia y el importe de los recursos volcados por cada una.
