El sábado 17, sobre la tardecita, se conoció la noticia de la partida física de Alejandro Hortoneda, conocido músico percusionista sanducero. Diagnosticado con COVID-19, se hallaba internado desde hacía varios días en el hospital. Tenía 41 años.
Desde hacía ya unos cuantos años, “el Ale” –como lo llamaban sus amigos– venía participando de un gran número de experiencias musicales sanduceras. Una de las propuestas artísticas más recientes fue Slamalil K’inal, el dúo que integró junto a la cantautora Magui Más, con el que incluso ofreció un recital virtual que puede verse en YouTube. Durante muchos años acompañó a Nahuel Lemes, con quien recorrió innumerables escenarios no solo de Paysandú sino de todo el país. Integró grupos musicales como Motor Eterno, Marejada y Trío al Aire, además de participar en muchos otros como invitado. Vinculado al carnaval, fue parte de agrupaciones como Los Charoles, La Selección y Costilla de Nadie, murga femenina en la que era el único varón. Fue también un colaborador permanente del espacio cultural Cíclopes, donde además de aportar su música solía ayudar en el armado y desarmado de los escenarios y el sonido y en todo lo que hiciera falta. Pero, sobre todo, era alguien siempre dispuesto a aportar el sonido de sus instrumentos, para colaborar con cualquiera que tuviera algo que expresar. Las que mencionamos antes son solo algunas de sus numerosas experiencias artísticas, citadas a modo de ejemplo, en estas palabras que no pretenden ser un recuento de su actividad sino un homenaje a su memoria.
Desde 2020, la falta de actividades musicales y de trabajo que trajo la pandemia lo había llevado a trabajar en un parrillero en el barrio donde nació y vivió siempre, en las inmediaciones de la cancha del Atlético Bella Vista. La institución deportiva tuvo para él palabras de despedida, a través de su página de Facebook. “Tristemente tenemos que despedir a un hincha papal de corazón, Alejandro Hortoneda, el popular ‘gordo Ale’, quien siempre nos ha contagiado con su sonrisa y carisma. Atrás del arco, en cada viaje o en la previa de los partidos siempre estaba presente con el sonido de su tambor. El pueblo papal te despide y sabemos que nos vas a alentar desde donde estés. El barrio está de luto, se fue uno de sus íconos. Acompañamos a sus familiares, amigos y allegados en este doloroso momento”, dice el mensaje, que se suma a muchos otros en los que artistas y amigos del fallecido expresaron su dolor.
Humilde, de perfil bajo, siempre de buen humor, Alejando Hortoneda, “el Ale”, fue un auténtico músico popular, que será recordado con afecto por sus colegas artistas y por todos quienes lo conocieron.