Con la cantidad de nuevos casos COVID-19 anunciada en la víspera por el Sistema Nacional de Emergencias (Sinae), de 215, se superó el récord del 19 de mayo, cuando se confirmaron 201 contagios. Por otra parte, se rectificó las cantidad de activos del viernes 28 –había anunciado 87 y un desperfecto informático– que quedó establecida en 166.
Además, con cuatro nuevos fallecimientos se alcanzó la trágica cifra de 90. El viernes murieron dos hombres de 64 y 71 años, y ayer sábado otros dos hombres, de 50 y 60 años. Estos últimos estaban internados en CTI COVID-19 del prestador privado.
En dos días, sumando viernes y sábado, Paysandú tuvo 381 positivos, convirtiéndose en uno de los departamentos con más rápida expansión del virus. Casi todos los casos son infecciones con la cepa P-1 (Manaos), cuyo nivel de contagio es 2,7 veces superior a la que inició la pandemia.
El viernes, los activos sumaban 1.622, los recuperados 5.404, los fallecidos 88 y el total 7.114. Ayer la cantidad de activos, aún cuando fue día récord, bajó a 1.538. Como se ha explicado en otras oportunidades, esto ocurre por la cantidad de recuperados que se registran, que superan satisfactoriamente la enfermedad. Ayer la cantidad de pacientes dados de alta fue de 172, sumando en total 5.576. Los fallecidos son 90 y el total desde el inicio de la pandemia 7.204 personas.
Un dato muy preocupante es que hay 20 pacientes en CTI COVID-19, 14 en Comepa y 6 en el hospital. También es muy elevada la cantidad en Sala COVID-19, 28 en total; 13 en Comepa y 15 en el hospital. Entre los internados en cuidados intermedios hay dos embarazadas a las que se les practicó cesárea –con resultado satisfactorio– que ahora luchan con la enfermedad.
El director departamental de Salud, Carlos Leoni, agregó mayor preocupación al indicar que “estimamos en 10.000 las personas en cuarentena, aunque sabemos claramente que hay irresponsables que no la cumplen y siguen trabajando, poniendo en peligro la salud de compañeros y clientes si correspondiere. Esto quiere decir que hay que hacer 10.000 llamados telefónicos para ubicarlos y ver cómo se encuentran. No tenemos ni personal ni medios para hacer tamaña tarea. Pero pongamos que de esa cantidad la mitad deba ser sometida a un hisopado porque es necesario determinar si ha contraído el virus. De nuevo la misma situación. No tenemos médicos, enfermeros, vehículos y todo lo demás. Estamos desbordados y esto debe ser considerado por las autoridades. Es una situación extremadamente compleja y la cantidad de contagiados como de fallecidos es una prueba más que evidente. Que cada persona se cuide al máximo, que no confíe, que no comparta nada. La vida está en juego”.
INTENDENCIA: 35 CASOS Y 70 EN CUARENTENA
Tras la reunión de análisis de situación y coordinación realizada a través de la plataforma Zoom por el intendente departamental Nicolás Olivera, el secretario general Fermín Farinha y directores, se determinaron algunas medidas adicionales para evitar que en la Intendencia se multipliquen los casos de COVID-19. Por un lado, defendiendo la salud de los funcionarios y por otro para que ningún servicio esencial deje de ser brindado.
Actualmente unos 35 funcionarios cursan la enfermedad y hay alrededor de 70 que están en cuarentena como resultado directo de contacto con alguno de los positivos. Evidentemente, la cantidad de contactos directos de los contagiados es mucho mayor. El director del Hospital Escuela del Litoral, Gustavo Curbelo, dijo el viernes que la cifra “puede ser de 50 personas por cada positivo”. Pero eso incluye amigos, familiares y demás. “No solamente a los funcionarios municipales. Por esa razón, en lo que refiere exclusivamente a la Intendencia, la cifra es bastante baja. Lo que ocurre en el área extra laboral, es otra cosa”, indicó Farinha.
Cursando la enfermedad hay funcionarios de Vialidad, Tránsito, Escribanía y Comunicación entre otras áreas en la Intendencia. “Si bien cada caso lo tomamos muy en serio y ponemos todo a disposición, desde los Servicios Médicos hasta ayuda en canastas si fuera necesario, hay que destacar que las tareas esenciales que debe desarrollar la Intendencia se siguen cumpliendo con total normalidad, aún en pandemia”, aseguró el secretario general de la Intendencia.
“Tanto en Promoción Social como en Servicios, no hay ningún debilitamiento en la estructura que brinda la Intendencia. Tampoco en Obras, aunque en ese Departamento se consideran esenciales, en estos momentos de aumento de casos en el departamento, solo aquellas obras que están en proceso de realización”.
“En adelante seguiremos haciendo hincapié en el estricto respeto de las burbujas laborales, en aconsejar a nuestro personal que fuera de la Intendencia también se mantenga dentro de su burbuja conviviente y que se extremen las medidas de prevención”, aseguró Farinha.
ESTUDIANTES PIDEN PERMANECER EN HOGAR
Los estudiantes becarios que residen en el Hogar de Paysandú en Montevideo piden que se les permita permanecer en la casa, que la Intendencia quiere cerrar ante la pandemia. Piden que “se reconsidere la resolución tomada por usted (Guadalupe Caballero, directora de Promoción Social) y el Intendente de imposibilitar la permanencia en dicho hogar. Los motivos que nos llevan a solicitar esta petición” incluyen “no disponer de una conexión estable ni un espacio de estudio adecuado en nuestras casas, lo cual repercute directamente en el rendimiento académico y por consiguiente la posibilidad de mantener y renovar las becas tanto del Fondo de Solidaridad como Bienestar Universitario”. Aducen además “que la situación sanitaria de Paysandú está atravesando un momento complicado, con una tasa de contagios mayor a la de Montevideo con un crecimiento elevado de nuevos casos”.
