Uriarte visitó mujeres que producen hierbas aromáticas orgánicas

El secretario de Estado y directores junto a integrantes del grupo Tapia.

El ministro de Ganadería, Agricultura y Pesca, ingeniero agrónomo Carlos María Uriarte, visitó el establecimiento del “Grupo Tapia” en donde se producen hierbas aromáticas de forma orgánica, gracias a un grupo de mujeres rurales. Este grupo de mujeres que comenzaron desde cero, en 1994 emprendieron la transición a producción orgánica y actualmente conforman una cooperativa. Feral S.A les da la marca “Campoclaro” y las apoya en la comercialización de su producción.

El secretario de Estado, que estuvo acompañado por los directores de la Granja, de Desarrollo Rural y de los Servicios Agrícolas, expresó que “queremos apoyarlas en todo lo que esté en nuestro alcance y ofrecerles el marco normativo para que puedan desarrollarse y crecer”. Luján, productora del grupo Tapia explicó que se ha logrado derribar el mito de que produciendo orgánico no se cosecha. Asimismo, Marta, también productora del grupo Tapia, agregó que “en su momento la mujer rural tenía su ingreso supeditado a la producción que hacía y definía el hombre. Hoy somos quienes tenemos el mejor ingreso en el hogar”.
Solo algunas de las plantas que cultivan las emprendedoras son: radicheta, lechuga, tomillo, romero, albahaca, ciboulette y mostaza. Su producción orgánica es fresca todas las semanas y además de lo que producen hacen mezclas de semillas y especias. La productora Alicia contó que la producción orgánica tiene sus secretos. “Hay que respetar la naturaleza y sus tiempos”, dijo. “La gente se está concientizando de que hay que comer sano y creo que es un mito que lo orgánico sea un nicho exclusivamente de gente con dinero; en cada pueblo, en cada localidad, se están comercializando los productos orgánicos. Nosotras trabajamos con mercados de cercanía”.

Alicia, recordó además que “nosotras nos criamos en la escuela aprendiendo a querer el campo; por eso ahora recibimos escuelas y liceos y a todos los que quieran venir a ver nuestra experiencia. Hay que meter azada y agachar el lomo para producir de forma orgánica. Eso del matayuyos no existe”, concluyó.