La Justicia imputó a un adolescente de 15 años como responsable de haber cometido abusos de índole sexual en perjuicio de una niña de tan solo 4 años, de su propia familia.
De acuerdo a lo informado por Jefatura, la denuncia fue radicada en agosto del año pasado ante la Comisaría Especializada en Violencia Doméstica y de Género por la madre de la pequeña. En esa ocasión, la mujer explicó que la víctima y el adolescente se conocían –vinculándolos un lazo familiar– y que los hechos ocurrieron en ausencia de personas mayores, dentro de un domicilio particular. Debido al tenor de la denuncia, se dio pronta intervención a Fiscalía, que dispuso la valoración médica de la niña.
Las actuaciones prosiguieron a nivel de la Justicia, que resolvió la formalización de la investigación y posterior juicio abreviado para el adolescente –de 14 años al momento del hecho–, quien resultó imputado y condenado por “una infracción grave a la ley penal tipificada como un delito de atentado violento al pudor agravado”, imponiéndole una medida socioeducativa no privativa de libertad por el término de 18 meses y bajo el régimen de libertad a prueba. Para ello deberá cumplir con una serie de condiciones, entre ellas estar supervisado por INAU.
