Cuidacoches salvó a un niño extraviado de ser atropellado

Edgardo Gómez y su esposa Joana Fernández trabajan desde hace más de dos años como cuidacoches, teniendo a su cargo la parada en Dr. Verocay y avenida España. En el trato diario, conocen todas las caras de las personas, tanto de aquellas atentas como de las que siempre andan a las corridas. Esta vez se convirtieron en héroes, al salvarle la vida a un pequeño que llevaba más de media hora desaparecido.
De acuerdo al relato de Gómez a EL TELEGRAFO, cerca de las dos y cuarto de la tarde notó la presencia de un niño de no más de 3 años, corriendo cerca de la esquina. “En ese momento veo que venía un auto y el nene así como venía, corriendo, bajó la vereda para cruzarse con todo. Lo único que atiné a hacer fue pegarle el cinchón de un brazo porque si no, lo pasaba por arriba. Hasta me ligué un reto del automovilista que me dijo ‘cuidá a tu hijo’”, comentó. Lo que el automovilista ignoraba era que el pequeño era un desconocido para Edgardo.
Asustado por la situación, el niño comenzó a llorar. “Mi señora fue la que lo contuvo, lo abrazó hasta que se calmó y empezamos a mirar para todos lados, porque de algún lado había salido esa criaturita. Me fui con el nene de la mano preguntando a las personas si alguno era el padre o la madre, y hasta la panadería cercana porque capaz la mamá estaba comprando y no vio que el nene se le escapó”, dijo. La cuestión es que nadie parecía reclamarlo.
“Como mi celular anda mal no podía llamar al 911 para informar, entonces pedí a una señora que por favor llamara porque el niño estaba solo. A los minutos llegó la Policía y me dijeron que hacía media hora o 45 minutos que habían denunciado su desaparición. Nos tomaron declaración y el policía llamó por teléfono a la madre para que el nene se calmara y después se lo llevaron”, dijo.
“Me nació hacer eso porque uno ante todo es humano y yo no sabía qué podía pasar, ya que nadie estaba ahí con él en el momento”, comentó, feliz por haber contribuido a proteger la vida de un inocente.