La Junta Departamental de Salto aprobó por unanimidad la restricción de fuegos de artificio que generan ruidos extremos, con una resolución que es coincidente con la votada en Paysandú y otros departamentos.
El vicepresidente de la Junta Departamental salteña, Pablo Alves Menoni, dijo a EL TELEGRAFO que “el proyecto abarca la venta, exposición y uso de pirotecnia”, y recordó que “en diciembre presentamos un proyecto dos ediles del Frente Amplio y presentaron uno parecido dos ediles del Partido Nacional. La comisión de Salud, higiene y medio ambiente trabajó con los dos proyectos y se estudió durante seis meses, consultando por ejemplo a la gente del Servicio de material y armamento del Ejército, especialistas en explosivos que están en Montevideo, y se unificaron los proyectos. Luego se mandó a la Intendencia.
Se define según los decibeles
“Quedó solo un artículo para agregar más adelante, cuando quede definido el detalle con el ministerio correspondiente, hasta dónde es pirotecnia sonora, es decir, cuáles son los que se pueden usar y cuáles no; eso se va a definir según los decibeles que se registren”. Además, “se está trabajando en una ley nacional que va a reunir las distintas reglamentaciones”.
Hay elementos que se podrán utilizar, como los volcanes y otros equipos que son básicamente de luces, así como las bengalas y las cañas voladoras con luces, y “queríamos sacar el decreto en julio para que los importadores tengan seis meses para ver lo que van a comprar según lo que se va a poder seguir vendiendo”.
Quienes tengan remanentes del año pasado de esa pirotecnia extremadamente ruidosa, no podrán comercializarlo, pero Alves afirmó que “hay quien afirmó que puede haber mucho guardado, pero de estos productos generalmente no se hace un gran stock que quede de un año para otro, porque es muy peligroso, ya ha pasado que se han quemado depósitos con personas afectadas”. A su juicio, “el mundo ha cambiado y los grandes fabricantes de este tipo de artefactos los hacen para vendernos a nosotros, pero ellos usan otros juegos de luces, que no dañan tanto el medio ambiente y a las personas”.
“El objetivo principal es pensando en los niños con espectro autista, el bienestar animal, personas mayores que sufren por el ruido, el medio ambiente y la gente que se lesiona por usar ese tipo de artefactos, así como el riesgo de incendio”. Aclaró que “se prohíbe el uso de pirotecnia sonora, por ejemplo el cohete de tres tiros o el bomba, no se prohíben las luces, que hacen un ruido pequeño y a gran altura”.
Hay multas de hasta 350 UR
Por el decreto, “la Intendencia está facultada al decomiso con el apoyo de material y armamento del Ejército, que son los especialistas para el acopio y destrucción del material. Y tiene multas que van desde 5 hasta 350 Unidades Reajustables (UR). Si bien no es un proyecto con fines recaudatorios, lo que se recaude por multas irá destinado a una campaña de concientización, a las protectoras de animales y a los centros o escuelas que trabajen con niños autistas”.
El decreto ya está vigente, y el edil frenteamplista destacó que “políticamente es un hecho importante, porque desde que los proyectos entraron en la Comisión de salud, pasó por el asesor jurídico, por la Intendencia, volvió a la Comisión de legislación y reglamento donde se votó por unanimidad que pasara a plenario, donde fue un voto unánime y de todos los partidos justificaron su voto a favor. Fue una señal política de cuando las cosas son buenas para el departamento, todos los ediles somos capaces de ponernos de acuerdo en aprobarlo”.