Si bien aún no se radicó denuncia penal por el incidente, la Junta Departamental de Soriano elevará a la Comisión de Ética la denuncia por lo ocurrido el fin de semana en Paysandú cuando –en el marco del Congreso Nacional de Ediles– un edil del Partido Nacional filmó a una compañera mientras se duchaba en el hotel en que estaban hospedados.
De acuerdo a lo informado por fuentes vinculadas al evento, el legislador había estado espiando a la mujer mientras ella se bañaba y, en un momento, cuando ella estaba de ojos cerrados, metió el brazo por la banderola de la ducha y la filmó con su celular. Al abrir los ojos, la edila se percató de lo que hacía su compañero de bancada y salió a buscarlo. Al darse cuenta de la situación, la mujer habría irrumpido buscándolo a los gritos y exigiéndole que le diera el celular. “Tomá el celular, borrá todo vos misma”, le dijo el curul, tal como dijeron testigos del suceso. Ambos legisladores pertenecen a la misma lista del Partido Nacional.
Luego de que el hecho trascendiera y las autoridades de la Junta Departamental de Soriano se enteraran, dieron orden de que el edil regresara inmediatamente a Mercedes.
En tanto, el presidente de la Junta Departamental, el edil nacionalista Raúl Bruno, consultado sobre si se había iniciado alguna investigación administrativa sobre la conducta del edil, respondió que se estaban recibiendo los primeros informes sobre lo sucedido en el Congreso Nacional, mencionando las reuniones de las comisiones.
Por su parte, tras una extensa reunión de más de tres horas, la Junta resolvió elevar el tema a la Comisión de Ética para que investigue. Más temprano, Pablo Iturralde, presidente del directorio del Partido Nacional, había sugerido que el curul debía dar un paso al costado. Los dirigentes en Soriano entendieron que es necesario dar garantías de una investigación antes de solicitar la renuncia o expulsarlo del partido.
A los dirigentes locales les llamó la atención que la edil no radicó la denuncia policial que permitiría periciar el teléfono y recuperar las imágenes borradas. El denunciado admitió haber pasado una mano por la banderola y declaró que lo hizo a modo de broma, lo que también fue cuestionado por sus pares.
Pedirá licencia en la junta mientras dure la investigación.
