La Junta Departamental de Paysandú aprobó por unanimidad, hace tres meses, la prohibición del uso y comercialización de pirotecnia sonora en el departamento. Sin embargo, falta la reglamentación del decreto que especifique algunos aspectos de la norma que se encuentra vigente. Las organizaciones sociales, activistas medioambientales, animalistas y por la discapacidad, consideran la existencia de un “vacío legal”, ante la inminente llegada de Navidad y Año Nuevo, en tanto han comprobado la venta al público de estos productos.
El edil del Frente Amplio, Sebastián Martínez, señaló que el decreto fue aprobado “el 2 de julio en la Junta Departamental. Se promulgó automáticamente a los diez días y, a la fecha de hoy, no tenemos una reglamentación de dicho decreto, por lo tanto existe un vacío legal. Hay prohibición de la pirotecnia pero no hay quien controle y fiscalice”.
La Asociación Civil Coendú, dedicada a la conservación de fauna y flora nativa del Uruguay; Araí, el centro especializado en la atención del autismo en Paysandú, la oenegé Amigos de los animales y el grupo ecológico Gensa, expresaron su preocupación e instaron a que el Ejecutivo departamental lo reglamente lo más rápido posible.
Cristina Aguilera integrante de Araí, explicó que el autismo es “un trastorno que tiene muy acentuado los aspectos sensoriales y no pueden procesar los ruidos y estímulos que reciben. Con la pirotecnia pasan muy mal los niños y sus familias, a tal punto que han terminado internados, con crisis y convulsionando. Una mamá nos decía que tienen que darle pastillas para dormir. O sea, a las ‘fiestas’ no las pasan”.
Aguilera informó que “en los días previos que comienzan con la pirotecnia hay que aumentarle la medicación porque se auto-agreden, se descontrolan. Es un gran sufrimiento para ellos y su entorno familiar. Es sumamente importante que se reglamente para poder aplicarse, porque es mucho su sufrimiento de niños, jóvenes y adultos”.
Fauna, flora y mascotas
Marta Martínez, representante de Coendú, subrayó que “nos preocupa muchísimo este tema porque ocasiona daño al medioambiente, en su flora y fauna. Todo lo contaminante que queda en suspensión baja al agua y la tierra. La avifauna, que es la más afectada, sufre la pérdida de nidificación, de hábitat y son aves que se mueren por la exposición a la sonoridad o a los contaminantes. Todos sabemos que la clandestinidad existe, pero en la medida en que se sienta que hay un control sobre el tema, disminuirá y será lo mejor posible para todos”.
La directiva de Amigos de los animales, Laura de León, relató que las mascotas “sufren la pirotecnia tanto en las fiestas tradicionales como en los partidos de fútbol. En los últimos días fue impresionante la cantidad y nadie controló. A pesar de que supuestamente está funcionando este decreto, nadie lo reglamenta. Estamos a dos meses de las fiestas, entonces creemos que ya debe pronunciarse el Ejecutivo y hacerle saber a la población que se organiza para el negocio”.
De León destacó que la reglamentación es necesaria “para evitar la compra de una mercancía que supuestamente no podrá vender. Muchos dicen que es una o dos veces al año que se tiran bombas, pero hay que ser un poco empático con esa población, ya sea de personas, animales o medioambiente. Por dos días no nos cuesta cambiar los hábitos que heredamos desde hace muchos años”.
Explicó que “es la época del año en que se pierden más perros. Al otro día las redes sociales están llenas de perros perdidos, se escapan, los chocan, muchos mueren y quedan tirados. Después nuestra organización sale a buscar a los dueños, a pagar los veterinarios y ver a los animales que no resisten”.
La Coordinadora Pirotecnia Cero, que nuclea a 70 organizaciones en el país, presentó una carta al intendente Nicolás Olivera, donde solicitan que “urgentemente se reglamente el decreto de prohibición de uso y comercialización de pirotecnia sonora y bombas de estruendo”.
Marilina Odella, edila del Frente Amplio, agregó que “hay once departamentos que tienen prohibiciones o regulaciones de la pirotecnia sonora. Por eso exhortamos a la población a que no utilice ni compre. Estamos preocupados porque nos dicen que están comenzando a vender. Que no nos agarre como todos los años a último momento porque las compras se han realizado”.