La ministra de Vivienda y Ordenamiento Territorial, Irene Moreira, participó en el sorteo anual de 1.521 cupos para la construcción de cooperativas de viviendas, de los cuales 719 corresponden a la modalidad de ayuda mutua y 36 cupos destinadas a cooperativas de ahorro y préstamo.
Un total de 766 viviendas fueron adjudicadas en forma directa por haber participado en tres sorteos consecutivos sin resultar beneficiadas. En este marco, Moreira anunció el retorno a los dos sorteos anuales desde el próximo año, interrumpidos en 2020.
“Llena de orgullo poder anunciar que, justamente gracias al esfuerzo de todos, en 2022 estamos en condiciones de volver nuevamente a la realización de dos sorteos anuales”, señaló. Asimismo, informó que el ministerio trabaja en acelerar los procesos y lograr la escrituración de los préstamos destinados a las cooperativas, a fin de reducir el atraso de este trámite.
En la oportunidad, anunciaron el calendario anual con fechas para la entrega de documentos y trámites orientados al sorteo que efectuarán a mediados y a fin del año 2022. Este calendario estará a disposición a la brevedad en la página web del ministerio.
En forma paralela, Moreira adelantó que junto a su equipo trabaja sobre los boletos de reserva de los terrenos para las cooperativas que así lo requieren. Explicó que, si bien es un asunto entre particulares, desde su secretaría de Estado existe interés por solucionar un problema que las cooperativas sufren por encontrarse en situaciones de desventaja.
La ley
Al finalizar el sorteo, la Federación Uruguaya de Cooperativas de Viviendas por Ayuda Mutua (Fucvam), aguardaba por el anuncio de la rebaja del interés hipotecario al 2%, en tanto las cooperativas que construyen a partir de la Reglamentación 2008 lo hacen al 5,25%. “La federación sigue expectante por el 2%.
“La ministra prometió que antes de fin de año iba a contestar sobre este punto, pero por el momento no hay nada. Otro aspecto importante es la instrumentación de alguna solución para las cooperativas que tendrán vencimiento en sus boletos de reserva por los terrenos. Una de las posibilidades es que sean absorbidos por las intendencias para las carteras de tierra o que el ministerio destine alguna partida especial con destino a la compra de esa tierra, antes de que venga el préstamo para las cooperativas que están complicadas”, dijo a EL TELEGRAFO el integrante de la dirección nacional de la federación, William Guerrero.
El dirigente reconoció que “es importante el anuncio de la ministra de volver a los dos sorteos anuales, pero reclamamos la necesidad de fortalecer el Fondo Nacional de Vivienda, para no depender de partidas presupuestales. De lo contrario, el dinero no alcanzará por la cantidad de cooperativas que tienen que construir. Además, es importante resaltar que los dos sorteos por año es lo que marca la ley. Y, de no haber un anuncio por el 2%, Fucvam piensa en retomar las movilizaciones en febrero”.
Cuatro de Paysandú
En el sorteo participaron las cooperativas Covisintex –43 casas– y Covigresa –40 casas–, pertenecientes al Plan de Vivienda Sindical, además de Covimupay –35 casas–, afiliada a Fucvam, cuyos proyectos se construirán en altura en el terreno de la antigua Paylana.
La cooperativa no federada “28 de Octubre”, que construirá 50 casas, se presentó por primera vez al sorteo. Ninguna salió sorteada, pero esta última volverá a presentarse a mediados del año próximo. Las restantes, al haber pasado ya por tres sorteos, salieron por asignación directa y escriturarán en 2022.
