El videoclip de la canción “Dos sanduceros en Praga” (https://youtu.be/Oy6LE2GBkeQ), de la banda sanducera Nandor Nácar, realizado por Jonathan Oroná mediante la técnica de animación stop motion, obtuvo el premio a Mejor animación en la categoría Internacional Liberty Communications del Festival Ponte los cortos, de Puerto Rico.
No es el primer reconocimiento para esta producción sanducera. Lanzada en junio de 2021, en setiembre de ese año fue galardonado como Mejor Corto de Animación Nacional en la 11ª edición del Festival Nacional de Cine Estudiantil (Fenacies). También en ese festival, cumplido en Montevideo, otro video de la banda –“Alicia”, dirigido por Mateo De León–, obtuvo el premio Mejor Videoclip Universitario Nacional.
El nuevo premio fue una gran sorpresa tanto para la banda como para el creador, dijo Agustín Cáceres, integrante de Nandor Nácar. “Fue a través del Fenacies, justamente, que se envió el video a Ponte los cortos, tras haber sido premiado el año pasado a nivel nacional. Nosotros pensamos que simplemente iba a ser exhibido en el festival de Puerto Rico. No sabíamos, ni habíamos entendido, que estábamos participando y ‘compitiendo’, entre comillas”.
Al regresar de Montevideo, donde estuvo trabajando en la grabación del primer disco de la banda, el músico recibió una llamada donde Oroná le comunicó la noticia.
“Me avisaron que ganamos. La verdad que ni sabía que estábamos compitiendo”, le dijo. “Ninguno de nosotros lo sabía”, agrega Cáceres.
En 2021 el video participó también en el Festival Internacional de Animación –donde llegó a ser finalista, compitiendo con otros de India, Francia, Chile y Uruguay–, y en el 9° Festival de Cine Nuevo Detour.
Orgullo y emoción
“Es hermosa la noticia”, dice Jonathan Oroná. Si los premios anteriores fueron motivo de alegría para él, el nuevo lo llena de orgullo y emoción. Más aún porque su trabajo está hecho con un presupuesto mínimo.
“Nosotros trabajamos con un presupuesto bastante acotado, donde la mayoría de las cosas son reciclaje. Es un set de grabación que tiene muchas partes, pero que está hecho con madera, cartón, tela, pintura,alambre… Es como bastante rústico, rudimentario”.
Destaca la colaboración en el trabajo de su hermano, Luis Oroná, para crear la animación. “La íbamos haciendo un poco intuitivamente, otro poco mirando a nuestros referentes. A mí me gusta mucho el dibujo, la fotografía; tenemos nuestras referencias ahí también. Que un trabajo hecho así, con tanta dedicación, que es hasta familiar –porque lo hice con mi hermano, y para la banda, que es gente amiga–, tenga un reconocimiento tan importante, me emociona, me da ganas de seguir, de poder compartirlo con la mayor cantidad de gente posible”.
Al ser un trabajo creado en su tiempo libre, expresa también el reconocimiento a su familia, “porque a ese tiempo libre tuve que compartirlo un poco con esta producción y otro poco con la familia, con mi señora, mi hijo. Ellos confiaron en nuestro trabajo, en que estábamos metiendo nuestro tiempo en algo que realmente vale la pena”.
Finalmente agradeció el apoyo de Nandor Nácar, “no solamente por convocarnos, por confiar, sino por toda su buena onda. También podría no gustarles lo que hacemos; sin embargo, siempre confiaron en nuestro criterio, en nuestra creación, y nos dieron para adelante”,
“Eso te da ganas de trabajar, porque te están reconociendo que lo que estás haciendo está bien, y vale la pena seguirlo. Estamos muy contentos, pensamos que es algo que ha dado muchos frutos, que el esfuerzo vale la pena, y que incluso puede seguir dando sus frutos, porque es una producción que es nueva”.