Nuevas reglas para evitar más accidentes: prevén penas de cárcel de hasta cuatro años por “conducción temeraria”

El proyecto busca cambiar el Código Penal para introducir la figura de la conducción temeraria, algo que no existe en Uruguay pero sí en otros países.

(El País)
El 2022 cerró con 37 millones de pasajes de vehículos por los peajes nacionales. Una cifra que significa con un aumento de cuatro millones con respecto al año anterior. La movilidad aumentó de manera significativa y todos los motivos giran alrededor de un factor común: el final aparente de la pandemia de COVID-19. En la primera quincena de enero las cifras también marcaron más movimiento en las rutas, con un incremento de 300.000 pasajes más que en los primeros 15 días de 2022.

Junto a esa suba vino una serie de accidentes de tránsito que acapararon la agenda noticiosa. ¿El motivo? Su “espectacularidad”, según el presidente de la Unidad Nacional de Seguridad Vial (Unasev), Alejandro Draper.

En medio de esta serie de accidentes “espectaculares”, hay un sistema que está en vísperas de ser modificado por completo y se habla de la gesta de un “cambio cultural” en materia de tránsito con la introducción de la libreta por puntos. Así, las autoridades ultiman los detalles de un proyecto que se reglamentará este año pero difícilmente se ponga en práctica hasta 2025. Y, en paralelo, discuten otras iniciativas para influir en las normas de tránsito, incluso algunos que fracasaron en el pasado, pero que ahora podrían ver la luz gracias a que el tema volvió a estar sobre la mesa.

Uno de los proyectos que naufragó en 2016, cuando fue presentado en el Parlamento, fue el del senador del Partido Nacional Gustavo Penadés sobre la “conducción temeraria”. Sin embargo, ahora Penadés cuenta con el apoyo de las autoridades de la Unasev, que presentará el proyecto de ley durante los primeros días de marzo, según supo El País. No será Penadés el promotor principal, porque el organismo que depende del Poder Ejecutivo “le dará más fuerza”, según indica el senador.

El proyecto busca cambiar el Código Penal para introducir la figura de la conducción temeraria, algo que no existe en Uruguay pero sí en otros países, y que regiría a partir de determinados siniestros que “pusieran en peligro la vida o la integridad física de las personas”, según establece el proyecto, al que accedió El País.

Las condiciones que configuran a la conducción temeraria como tal son principalmente dos. Por un lado, para las personas que conducen “un vehículo motor o ciclomotor” bajo la influencia de “drogas tóxicas, estupefacientes, sustancias psicotrópicas o de bebidas alcohólicas” cuando la tasa de alcohol en sangre supere los 1,6 gramos por litro. Por el otro, también es condición para aplicar la conducción temeraria el conducir a una velocidad “superior en 60 kilómetros por hora a la reglamentariamente permitida en zonas urbanas y rurales, o a una velocidad superior en 80 kilómetros por hora a la reglamentariamente permitida en rutas nacionales”.

Para ambos casos, el proyecto de ley prevé que la persona que caiga en la conducción temeraria cumpla una pena de prisión de entre seis meses y cuatro años, sumado a una “inhabilitación especial para conducir vehículos por el doble del tiempo de la condena”.
Para Penadés, el proyecto es “importante y oportuno” y por eso lo trabajó con el equipo de jurídica de Unasev durante los últimos meses “apostando a que finalmente se establezca”.

El proyecto de ley que será discutido por los parlamentarios en los próximos meses también castiga las competencias de autos conocidas como “picadas” y entiende que quienes participen en estas competencias callejeras también incurren en la “conducción temeraria” y podrán ser castigados con entre seis meses y tres años de prisión, sumado a una inhabilitación a conducir por el doble de tiempo de la condena que determine el juez.

Para el presidente de Unasev, “el norte” del proyecto es “evitar los siniestros de tránsito” y lo mismo ocurre con las otras iniciativas que está trabajando el organismo. En el caso de la conducción temeraria, se indica que las “posibles causas” de los problemas viales “pueden ser resultado de la falta de control por la dificultad de no tener las normativas adecuadas para poder hacerlo” y eso “redunda en la necesidad de endurecer las penas en las conductas que más afectan a la sociedad y que representan un verdadero peligro para las comunidades”.

LACALLE POU Y BUSTILLO EN LA CELAC

(Telemundo)
El presidente Lacalle Pou viajará a Buenos Aires junto al ministro Francisco Bustillo para participar de la reunión de la Celac. La Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac) es un mecanismo intergubernamental de diálogo y concertación política que fue creado en 2010 y está conformado por los 33 países de América Latina y El Caribe.

La novedad en esta edición es el retorno de Brasil, formalizado hace unos días por el gobierno de Lula, después de que el exmandatario Jair Bolsonaro suspendiera en enero de 2020 su participación.

Argentina, que ejerce la presidencia pro tempore de la Celac, prevé la participación de “la enorme mayoría” de los presidentes de los países que integran el bloque.

Las autoridades uruguayas tomarán la cumbre como una “plataforma” para ver cuál es el posicionamiento del nuevo gobierno brasileño en el escenario regional, y cómo puede incidir en la política aperturista que impulsa el gobierno uruguayo. En el Ministerio de Relaciones Exteriores esperan un clima de diálogo, no de confrontación, como una suerte de “preliminar” del encuentro que mantendrán los presidentes Lacalle Pou y Luiz Inácio Lula da Silva en Montevideo, el próximo miércoles.