Organizada por la Unidad de Descentralización y la Dirección General Forestal del Ministerio de Ganadería Agricultura y Pesca, junto con el Ministerio de Ambiente, Montes del Plata y la Asociación Rural de Paysandú, tuvo lugar una jornada interinstitucional sobre la importancia de la conservación del bosque nativo con una charla y posterior recorrida por un monte nativo ubicado sobre el arroyo San Francisco, ocasión en la que los asistentes pudieron observar diferentes especies, características, posición en el paisaje y sus usos.
Las conferencias comenzaron con el Ing. Agr. Agustín Bóffano, del MGAP, quien aportó una mirada institucional sobre la gestión del bosque nativo en el Uruguay, sus beneficios y las prácticas con las que la Dirección Forestal cuenta para su manejo. Desde el área SNAP Montes del Queguay, su guardaparques Téc. Federico Barrede, se refirió a esta área protegida de gran diversidad –ubicada en la confluencia de los ríos Queguay Grande y Queguay Chico, en el paraje Rincón de Pérez–, su plan de manejo que incluye condiciones de uso y acciones necesarias para cumplir los objetivos de conservación. En tanto, la ponencia del Ing. Agr. Horacio Giordano, especialista en medioambiente de Montes del Plata, versó sobre la estrategia ambiental de la empresa. En el cierre, el Ing. Agr. Andrés Berrutti, especialista en monte nativo habló sobre las diferentes especies, los potenciales usos de cada una de ellas y el correcto manejo del bosque nativo para su conservación.
ESTRATEGIA
En diálogo con EL TELEGRAFO, el Ing. Giordano explicó que en la estrategia mundial actual de “conservar y producir”, en “Montes del Plata aparecen dos conceptos fundamentales, que es el concepto de representatividad y complementariedad” junto al de “precaución frente al no conocimiento de la industria de alguna zona”. Frente a ese desconocimiento, el enfoque es “preservar” primero y luego diseñar “la estrategia de conservación”, apareciendo “este concepto de representatividad”. Así, “aparecen la áreas de alto valor de conservación, que representan diferentes ecosistemas únicos que tiene la empresa y la representatividad de los diferentes ecosistemas que tiene en los diferentes usos, mucho monte nativo y añade pastizales también. Nosotros tenemos más de 40 mil cabezas de ganado dentro de campos, o sea, hay áreas también de pastizales representado en el patrimonio de Montes del Plata”, explicó.
“Montes del Plata conserva 90.000 há de áreas naturales, principalmente Áreas de Alto Valor de Conservación y Áreas Representativas, áreas históricas culturales, paleontológicas y áreas sensibles, que si no se cuidan se puede ver afectada su preservación. 9.000 há son de monte nativo, donde realizamos control de exótica leñosa para su conservación y la producción de los servicios ecosistémicos”, puntualizó.
LA IMPORTANCIA DEL MONTE NATIVO
“Los montes nativos son importantes porque, a pesar de que en números grandes son un 5% de la superficie del país, albergan el 90% de las leñosas, el 90% de los mamíferos, los anfibios y los reptiles, en su mayoría están asociadas las aves en un 61%”, observó. De modo que, en su visión, “esa proyección que le dio la Ley Forestal está bien aplicada, porque en realidad gran parte de la biodiversidad está concentrada en los montes nativos, a pesar de la poca superficie que es con respecto al país”, acotó.
Por esa razón se hace el énfasis en “la importancia que tiene el monte nativo para el Uruguay, la importancia de la conservación”, enfocando además en “las amenazas que tiene” y en el manejo que en ese sentido debe hacerse. Entre estas, citó el corte de leña, que bien puede sustituirse con la proveniente de otros árboles que no son nativos como el naranjo, el eucalipto, el paraíso o el ligustro. Además, “las especies exóticas que también invaden montes nativos producen cambios de la biodiversidad, porque en la medida que éstas van ganando un lugar en esa biodiversidad se va como homonegizando ese monte nativo y va perdiendo esa variabilidad que es importante”. Otro de los temas a tener en cuenta es el de “la fauna exótica que tambien se refugia a veces en el monte nativo, como el jabalí, los ciervos, lo utilizan como área de conservación, de preservación, de reproducción, refugio y alimento”. A la vez, mencionó acciones del hombre como encender un fuego tratando de limpiar “esta mugrera”, y en realidad “estamos quemando cosas que demoraron años en reproducirse”.
CONTROL DE EXÓTICAS LEÑOSAS
Desde Montes del Plata “uno de los principales puntos” en los que se enfoca el accionar en este sentido “es el control de las exóticas leñosas para no perder biodiversidad; limpiar entre comillas los montes nativos de las exóticas leñosas que son los paraísos los ligustros, los pinos, los eucaliptus”. Sobre esta última especie, aclaró que “en el caso de los eucaliptos de Montes del Plata prácticamente no fructifican porque los cortes son más cortos”, es decir “en el caso del eucalipto dunii no alcanza a florecer porque esta especie demora más y por lo tanto no fructifica y no genera semilla”.
Al mismo tiempo, se llevan adelante “monitoreos”, de manera de “saber sobre este monte nativo que yo hoy estoy protegiendo qué tan funcional es para las especies que habitan”. En ese sentido, “se están haciendo monitoreos en aves y en mamíferos con cámaras trampa” que permiten “identificar el uso que está teniendo ese monte nativo y las especies que están en ese lugar”, describió.
A través de ese manejo, “por ejemplo, encontramos un ratón de hocico ferrugíneo, que están en el centro del país y que es un mamífero de menos de un kilo –un micromamífero–, que vive en los árboles”, indicó, al tiempo que explicó que a partir de ese hallazgo “desarrollamos toda una estrategia de monitoreo y esa área hoy es de alto valor de conservación porque justamente está protegiendo una especie que es muy difícil de ver, de encontrar y porque es parte importante en la cadena trófica de alimentación”, cerró.
