“Todas las inauguraciones para mí son un nacimiento”, dijo el presidente Luis Lacalle Pou en la inauguración del Mevir nucleado en Guichón.
“Mevir tiene algo especialísimo”, destacó, pues en la inauguración “son reconocidos con razón la gente que estuvo trabajando acá. Se reconoce al capataz, a los albañiles, a los arquitectos, al asistente social, porque fueron los que estuvieron acá, cumplieron un mandato, supieron cumplir su tarea”.
“A Mevir le agregamos un poquito más –aseguró el presidente de la República–: los participantes. Seguramente muchos no habían agarrado antes una cuchara en su vida, levantado un muro, pero aprendieron, le pusieron cariño y no solo construyeron su casa, construyeron la casa de todos. Ese es un acto de saber cumplir, no solo con su familia, sino con la comunidad”.
“ES UNIR Y NO DIVIDIR”
Ahondando en su responsabilidad de Estado, dijo que “la función de un gobernante es como la de un gran padre, gran familia, es unir y no dividir. Por supuesto que quedan cosas por hacer. Ojalá que el gobierno que viene genere más confianza, más obras y sean mejores, porque la única forma que una sociedad tiene para evolucionar es mejorando con los que vienen”.
“Estamos satisfechos con el esfuerzo hecho y seguros que el día que pasemos raya el país va a estar mejor de lo que nos fue entregado, para que venga el próximo gobierno y le dé otro empujón”, aseguró Luis Lacalle Pou.
“La vida no es un instante, es lo que va aprendiendo, es lo que va queriendo, es lo que va conociendo. Nicolás (Olivera) hacía una referencia a obras y también a algo que es un dilema angustiante de un gobernante, que es decidir. Porque cuando se dice ‘esto sí’, y a veces se dice ‘esto no’. Considerando el concepto de justicia, hay que tratar de ser justos para invertir los recursos de todos”, dijo más adelante.
“CUMPLIR CON LOS COMPROMISOS”
“Para mí cantar el himno es una manera de expresarme como oriental, una manera de sentirme parte. Y también es una manera de obligarme”, indicó Luis Lacalle Pou.
“Dentro de las preciosas frases y conceptos que tiene, hay uno que se repite quizás más que en cualquiera de los himnos del mundo, que es el de libertad; es el sabremos cumplir”, indicó antes de hacerse una pregunta retórica: “¿Qué es saber cumplir para mí?” Subrayó que “primero es cumplir los compromisos. Porque no puedo decir que no vine a Paysandú siete veces en la última campaña, que no había dirigentes, actores, políticos que me decían lo que necesitaba Paysandú. No puedo decir que no me comprometí. Porque uno puede pasar por la vida sin comprometerse, puede pasar sin hablar, puede pasar sin debatir, puede pasar sin decir nada. Ahora, cuando uno habla y compromete, es esclavo de esas palabras. Pero no entiendo otra manera en la actividad política que comprometiéndome”.
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