Una inspección de desagües de aguas servidas, — que usualmente directamente van a la calle–, es realizada por el Departamento de Servicios, en coordinación con la Unidad de Inspección y Servicio a la Comunidad.
“Estamos haciendo un trabajo preventivo en aquellos lugares donde vemos aguas servidas y roturas de calle, que claramente pueden provocar inconvenientes entre los vecinos”, dijo el director general de Servicios, Carlos Batista.

“Lo que se hace en primera instancia es una advertencia, mediante nota, dejando constancia del trabajo de prevención que se hace y de la responsabilidad de cada vecino en relación a su vivienda y -en este caso- un adecuado tratamiento de los efluentes de la cocina, el área de lavado y el propio baño”, agregó. “Es un plan que volvemos a implementar para cuidar la convivencia de cada zona, de los barrios. Sabemos que las aguas servidas cuando empiezan a circular, no solamente rompen las calles y veredas; también generan situaciones complejas en la convivencia ciudadana”, destacó Batista.

El encargado de la Unidad de Inspección y Servicio a la Comunidad, Álvaro Lusich, por su parte, dijo que se trata de “actuaciones por oficio” que se realizan “cuando un inspector ve directamente el vertido de aguas a la calle. Habitualmente se trata de agua con jabón proveniente del lavado de ropa. Hacemos un trabajo preventivo, dándole al vecino la posibilidad de solucionar ese problema. Hay veces que no ocurre eso y nos vemos obligados a colocar una infracción, lo que no es el objetivo. Queremos que la ciudad de Paysandú esté limpia y saludable”. La inspección se realiza en las zonas donde no hay saneamiento de OSE, donde además se controla el periódico desagote de los pozos negros. Lusich dijo que se ha detectado que el desagüe directo a la calle de aguas residuales “utilizando el escape de emergencia que tienen los pozos, que se activa cuando se llenan, de modo que no rebalse agua en la casa. Pues hay gente que utiliza ese escape como algo normal y no pide la barométrica”.
Eso lleva a que en este período de inscripción “también revisamos el buen uso del servicio de barométrica allí donde es necesario. La mayoría de las veces todo se soluciona con la intimación para el uso del servicio”, destacó Lusich.

También aclaró que “no siempre se aplica una multa, porque tenemos muy en cuenta cada situación. Por ejemplo, si tiene que hacer un pozo negro nuevo se le da un plazo acorde. Ahora, si son cosas que se pueden solucionar rápidamente, se le da una advertencia y se controla a los tres días. Si no se soluciona, estamos obligados a hacer una infracción”.
Cuando se lo demanda, la regularización de los desagües de vertido directo es superior al 80%, de acuerdo a los registros de la Unidad de Inspección y Servicio a la Comunidad. Asimismo, el porcentaje de aprobación de gestión de la unidad es del 87% en el caso de denuncias y del 51% en el de quienes son denunciados.