La explicación de la clasificación de Trébol a semifinales del Uruguayo de Clubes de rugby, respondió a un gran primer tiempo y a un muy buen inicio del complemento ante Ceibos, donde pudo sacar una ventaja de 26-0 para encaminar el trámite a su favor. Sin embargo, como ha sucedido en otras instancias en el torneo, el equipo sanducero no pudo mantener la intensidad, dejó acercarse peligrosamente al rival y terminó el partido con sufrimiento (26-12 el final).
Así lo entiende Mateo Durán, entrenador de Trébol, que alabó la tarea de sus dirigidos en el primer tramo pero quedó preocupado con esa tendencia a perder el orden que se reflejó en la última media hora frente a Ceibos (que en la ida había ganado 23-19).
“Fue una llave complicada. Después del partido de ida, que jugamos mal, hicimos mucha autocrítica y notamos que estábamos muy tensionados. Esto nunca sabés para qué lado te va a pegar. Por suerte tuvimos 50 minutos de partido casi excelentes, donde salimos a batallar en ataque y a defender duro, disciplinados sobre todo, y conseguimos sacar una buena ventaja”, destacó.
En cambio, “caímos en los últimos 30 minutos, algo que nos viene pasando en el torneo”, continuó Durán.
“Eso no es de ahora, vemos que nos cuesta mantener el nivel porque perdemos la disciplina en defensa, cometemos muchas infracciones y penales, nos empezamos a poner nerviosos y fastidiosos, entramos en una zona negativa de actitud que se nos vuelve todo en contra”, insistió. “Venimos trabajando todo el año para salir rápidamente de esas situaciones”.
“DEPENDE DE TRÉBOL”
El primer try de Ceibos, que permitió la reacción del conjunto montevideano, arribó luego de desafortunados resbalones y pérdidas de pelota por el estado de la cancha: muy mojada y resbaladiza.
Durán no quiere, no obstante, agarrarse de esto para excusarse. “Esas son cosas que pasan, frente a jugadas desafortunadas tenemos que dar vuelta la página y seguir. Lo importante es mantener 80 minutos de concentración y aplicarse a lo que pedimos los entrenadores. Así nos volvemos un equipo muy competitivo”.
El 15 de este último compromiso presentó algunas variantes respecto al cotejo anterior, asentados en la idea de las rotaciones que llevan adelante esta temporada.
“Hoy (por el sábado) lamentablemente jugaba las semifinales la Intermedia en Montevideo, y nos tuvimos que traer ocho suplentes decisivos para nosotros, dejando un poco de lado esa categoría. El recambio siempre viene bien, le da oxígeno al equipo”. Alejo Durán, dueño de todas la patadas, estuvo en el banco de suplentes e ingresó en el complemento; Carlos Arboleya retornó al equipo en un alto de sus estudios en Estados Unidos.
Consultado por si tenía una preferencia en cuanto al rival en semifinales (Carrasco Polo u Old Boys), Durán respondió que “es lo mismo”.
“De aquí para adelante los equipos son muy duros. Igual soy un convencido que Trébol depende de Trébol. Si Trébol entra enfocado es muy probable que saque adelante el partido y si entra desconcentrado es muy poco probable que lo saque. Tenemos que enfocar muchísimo más en nosotros, no importa lo que venga”, concluyó el entrenador.
