Avanza proceso para incorporar examen psicofísico a las exigencias para obtener licencia de conducir

“Avanzamos en la instrumentación del examen psicofísico externo para obtener la licencia de conducir”, dijo Federico Álvarez Petraglia, director de Tránsito.
“No se trata de una idea traída de los pelos o trasnochada, sino que está en línea con lo estructurado por la Unidad Nacional de Seguridad Vial en su rol de organismo coordinador de la política nacional de seguridad vial, estableciendo los criterios médicos y psicológicos para definir las condiciones psicofísicas a exigir a los aspirantes para la habilitación a efectos de tramitar el permiso de conducir en todas las categorías”, indicó el director de Tránsito. “El principio rector es simple –agregó–, esto es que toda persona habilitada como conductor debe en todo momento poseer las cualidades físicas y psíquicas necesarias, encontrarse en estado físico y mental para conducir y poseer los conocimientos y habilidades necesarias para guiar vehículos de modo seguro para todo usuario de la vía pública. Lo que se hará con los exámenes a incorporarse será determinar eso”.
En ese sentido subrayó que “será competencia de los médicos y psicólogos decidir sobre el tiempo de vigencia del Certificado de Aptitud Psicofísica, según la categoría a la cual aspira o renueva, basándose en las normas o pautas de la actual reglamentación, teniendo en cuenta para el plazo: las edades límites, el resultado de la valoración médico psicológica y las restricciones a las que deben ceñirse los conductores. También se tendrá en cuenta el vehículo que va conducir”. Entre otras cosas, en el certificado psicofísico quedarán establecidas las patologías que generen restricciones si las hubiere, disposiciones o implementos que debe utilizar el titular; adaptaciones necesarias en la persona o en el vehículo (que deberá usar para conducir cuando corresponda); restricciones para uso diurno, de velocidad, o de zonas de manejo.
En Paysandú “ya hemos establecido conversaciones con los prestadores de servicios de salud y los laboratorios especializados para que puedan, si así lo desean, incorporarse al sistema. El certificado que entregarán tendrá una vigencia de tres meses para ser presentado ante la Dirección de Tránsito para tramitar el permiso de conducir”.
Esto significa que “el certificado médico psicológico no habilita a conducir; es el permiso de conducir el que tiene dicho valor”, destacó Álvarez Petraglia.
EXAMEN MÉDICO
En el examen médico, el usuario deberá completar una declaración jurada de su estado de salud. Luego se procederá a determinar si existen y en qué grado afecciones oftalmológicas y auditivas; hipertensión arterial y otras afecciones cardiovasculares; afecciones neurológicas, epilepsia u otras; diabetes y otras endocrinopatías; consumo de sustancias psicoactivas (alcohol, medicamentos, otras drogas).
Asimismo deberá tomar en cuenta afecciones psiquiátricas; intervenciones quirúrgicas; actitud y comportamiento durante la anamnesis médica; afecciones nefrológicas (por ejemplo diálisis, trasplantes renales entre otros); afecciones osteoarticulares que limiten la movilidad o fuerza; amputaciones, agenesia, malformaciones o prótesis que alteren la fuerza o movilidad.
EXAMEN FÍSICO
Tomará en cuenta la valoración en antropometría, examen ocular, agudeza auditiva, integridad anátomo-funcional músculo esquelética/neurológica, presión arterial y examen cardiovascular completo y pleuropulmonar. A esto, si así finalmente se determina, se podrán agregar exámenes básicos de laboratorio en mayores de 40 años y en licencia profesional sin importar la edad.
EXAMEN PSICOLÓGICO
Se deberán evaluar las aptitudes, las características más relevantes de la personalidad y las actitudes o comportamiento social del interesado. Esto incluirá la capacidad intelectual, la capacidad de atención, distracciones, fatiga, la capacidad perceptiva (conservación de la gestal, alteraciones), la orientación espacial, la coordinación viso-motora, el tiempo de reacción (coordinación de ojo-pie derecho), el deterioro extra edad, y la evaluación del proceso de decisión en situaciones de tránsito y nuevas.
En lo que refiere a la personalidad, se deberán tomar en cuenta la estabilidad emocional (control de los impulsos, agresividad), la adaptación a las situaciones nuevas, vínculos interpersonales, nivel de ansiedad, y trastornos o alteraciones de personalidad.
Finalmente, en lo referente al comportamiento social, se estudiarán la adecuación a las normas o figuras de autoridad, los hábitos reñidos con la conducción, como por ejemplo el alcoholismo, la baja tolerancia a la frustración y los valores y comportamiento manipulador.
“Estamos trabajando, a nivel intendencia y a nivel de todas las intendencias del país. Un trabajo serio, responsable, con el principal objetivo de mejorar la seguridad en el tránsito asegurando que quienes conducen están capacitados para hacerlo”, concluyó Álvarez Petraglia.