“Cada vez que agredan a un inspector, lo haré responsable a Olivera”, aseguró Álvarez Petraglia

“A partir de ahora haré responsable al diputado Nicolás Olivera de cada una de las agresiones que sufran los inspectores de mi Dirección (de Tránsito), atento a que es evidente que sus declaraciones en las distintas redes sociales significan una constante instigación a la bronca, al desacato y a la justificación de todos aquellos que supuestamente se ven ‘perjudicados’ por la aplicación de una multa”.
Así se expresó el director de Tránsito, Federico Álvarez Petraglia, ante una campaña del diputado Nicolás Olivera, que habla de “una voracidad recaudatoria por la Intendencia”. Olivera “a través de un dato de mayor recaudación en cuanto a las multas, quiere ‘denunciar’”, indicó el director de Tránsito. “No sorprende su falta de miras; está claro que él mismo y atento al cargo que detenta pudo haber analizado la situación diciendo que esto era un indicio de que se estaban haciendo las cosas bien, velando por el fiel cumplimiento de las normas, le duela a quien le duela. O que la cantidad de multas impuestas da cuenta de un problema de comportamiento del conjunto de los sanduceros con respecto a las distintas normas de tránsito”, dijo enseguida.
“Pero no, eligió –como lo viene haciendo en forma sistemática con todos los asuntos que involucren el tránsito de Paysandú– el camino de la demagogia. Despotrica ante una política de Estado que pretende el cumplimiento de las normas y la disminución de las muertes y lesiones en las calles del departamento. Bueno, gracias por tener ese punto de vista entonces. Ahora Paysandú sabe a quién no le importa la vida de sus sanduceros una vez que hayan puesto el voto”, aseguró con dureza.
Además, subrayó que “sorprende que el diputado, que integra el Partido Nacional, solo tenga voz para poner de manifiesto un aumento de la recaudación y que con ese pobrísimo análisis –a eso sí nos tiene acostumbrados– no haya dicho ni una palabra en estos dos años de gestión de lo que fue la administración de la que él fue parte, en el tránsito de Paysandú, donde una auditoría constató en forma flagrante la comisión de todo tipo de prebendas y delitos. ¡Ups! Ante eso se se llamó a silencio”.
“Ni que hablar respecto del último episodio, que involucra al hijo del exintendente Bertil Bentos”, siguió. “Si Nicolás Olivera lo hubiera denunciado, también lo habríamos multado y gracias a esta multa también habría aumentado la recaudación en la que tanto énfasis pone. Pero no solo Olivera jamás lo denunció, sino que ante el conocimiento público dado por esta administración guardó un estruendoso silencio. Sí, porque a veces el silencio hace más ruido que el griterío”.
“La verdad, realmente la verdad, es que Olivera no puede decir ni una sola palabra de la administración anterior y concretamente del exintendente Bentos, ya que –le guste o no– es diputado gracias a los votos de Bertil Bentos. Bueno, muchísimo menos puede hablar del hijo de quien le dio la banca que tiene, haya hecho lo que haya hecho”, opinó.
“Siempre es bueno refrescar la memoria y poner a cada cual en su sitio y recordarle a la ciudadanía quiénes son los que están trabajando día a día por el mejoramiento de la calidad de vida de los sanduceros y a quiénes no solo no se les cae una idea, sino que lo único que hacen es intentar envenenar el clima de convivencia de todos los sanduceros. Allá ellos, yo tengo claro del lado que estoy”, resumió Federico Álvarez Petraglia.