Restauraron una voiturette Ford de 1927

Hace casi un año presentábamos un automóvil Ford de 1927 que comenzaba a ser restaurado en el taller de Leonardo Chávez. En aquel momento, Chávez manifestaba que “estamos reparando la carrocería, trabajando en algunos elementos para luego dar la mano de pintura correspondiente. Se pintará de color crema, con los guardabarros negros. La capota también irá de color negro”.
También había manifestado que trabajaron en el tren delantero y en los frenos, una tarea que se hizo en el taller de Comín. El motor funcionaba a esa altura y lo sigue haciendo ahora sin problemas. Con la tarea terminada, Chávez expresa que al trabajo de pintura y a las demás tareas cumplidas se le sumó la puesta a nuevo del tapizado. También se dejó a nueva la instalación eléctrica, con lo que la voiturette, como se las denominaba en su tiempo, quedó como cero kilómetro.
Este Ford dos puertas abierto aparece ahora pintado en tono crema, con los guardabarros, la capota y los rayos de alambre de las ruedas en tono negro. Los estribos también prolijamente terminados, los faros ubicados a los costados del capó sobre una barra horizontal y la rueda auxiliar inserta en el guardabarro delantero derecho.
La parte trasera dispone de un espacio para colocar el equipaje o bultos. Allí se instala una puerta que se levanta y ese habitáculo dispone de un asiento donde, en verano, uno o dos pasajeros podían ubicarse para viajar “melena al viento”.
La voiturette era una especie de vehículo deportivo, ágil y divertido. Muy apreciado, sobre todo por la gente joven de aquellos años. Lo cierto es que esta versión del Ford 1927 quedó como en sus tiempos y se constituye en un referente vivo de un vehículo que era muy apreciado en su época.