¡Peñarol es el campeón uruguayo!

Peñarol 0 (4) Defensor 0 (2)
Escenario: Estadio Centenario. Árbitros: Daniel Fedorczuk, Nicolás Tarán y Martín Soppi.
Peñarol: Kevin Dawson, Guillermo Varela, Fabricio Formiliano (76’ Yeferson Quintana), Ramón Arias, Lucas Hernández, Fabián Estoyanoff (67’ Gastón Rodríguez), Walter Gargano, Cristian Rodríguez, Diego Rossi, Maximiliano Rodríguez (60’ Cristian Palacios) y Lucas Viatri. DT: Leonardo Ramos.
Defensor Sp.: Gastón Rodríguez, Gonzalo Maulella, Nicolás Correa, Andrés Lamas, Mathías Suárez, Mathías Cardacio, Carlos Benavídez (6’ Martín Rabuñal), Joaquín Piquerez, Matías Cabrera, Facundo Castro (83’ Pablo López) y Cecilio Waterman (115’ Héctor Acuña). DT: Eduardo Acevedo.
Penales: Cristian Rodríguez (P) gol; Matías Cabrera (DS) gol; Walter Gargano (P) gol; Joaquín Piquerez (DS) desviado; Ramón Arias (P) gol; Mathías Cardacio (DS) gol; Lucas Viatri (P) gol; Héctor Acuña (DS) desviado.

La definición fue corta: Peñarol venció a Defensor por penales tras empatar sin goles, y se consagró como nuevo campeón uruguayo.
Para el carbonero era vital el triunfo: ganando confirmaba la consagración. Por eso la presión era violeta, dado que Defensor debía ganar para así forzar a dos finales. Fue el castigo a ceder la tabla anual en la final ante Peñarol.
En este nuevo enfrentamiento los dos quedaron en deuda futbolística. Pero era una final. Peñarol estuvo lejos del rendimiento mostrado en el Clausura, y fue el violeta el que tuvo mejores intenciones.
Claro que en el equipo de Eduardo Acevedo las bajas eran importantes. Y, de yapa, a los 6’ de juego debió realizar la primera variante por lesión.
La realidad es que apuntaron poco al arco rival. Quienes debían trascender no lo hicieron y, con el paso de los minutos, ambos equipos apostaron al alargue.
Igual, en los instantes finales, el fantasma del gol sobre la hora rondó la valla violeta, pero la historia de la final de la tabla anual no se repitió y se fueron al alargue.
El cansancio ante el esfuerzo, y luego el miedo a perder, jugó en contra del partido. Los arcos permanecieron cerrados, por lo que se fueron a los penales.
Y Peñarol fue letal. Piquerez fue el primero en marrar en Defensor, y el festejo carbonero comenzó a gestarse. Y se desató con el remate a las nubes de Acuña.
Peñarol se repuso notablemente en el Clausura gracias a las incorporaciones, y se cansó de ganar. Tanto que, con viento en la camiseta, no paró hasta el título. Ahora, antes de la próxima temporada, irá por la Supercopa ante Nacional.