Primaria elabora estrategias para evitar casos como el de Brissa

(EL PAIS)
Cuando la Policía analizó el celular de Williams Pintos, el presunto asesino de la niña Brissa González, no encontró rastro alguno porque las conversaciones estaban borradas, pero los investigadores supieron que la víctima participaba de una comunidad virtual (Amino), en que la interacción con otros es sinónimo de éxito. Este detalle abrió la hipótesis de que homicida y víctima pudieron haber comenzado un vínculo virtual y encendió la alarma en el Consejo de Educación Inicial y Primaria. Lo sucedido en el caso Brissa “tomó por sorpresa” a la comunidad educativa y hace necesario “la búsqueda de un trabajo en las escuelas”, reconoció a El País Irupé Buzzetti, directora de Primaria. “Estamos buscando alguna línea de trabajo. Hay un desconocimiento de parte de las familias y de nosotros mismos (los maestros) de cómo se juegan y cuál es la lógica en determinadas redes”, dijo la jerarca. “Estamos en conversaciones con el Plan Ceibal y en la búsqueda de expertos para abordar el tema”, agregó.