Un aeropuerto de primera

El aeropuerto internacional de Carrasco hace historia. Desde la construcción de la nueva terminal aérea, adyacente a la antigua, no ha parado de crecer, de incorporar servicios y, pese a los vaivenes de la industria aeronáutica –cierre de Pluna incluido– ha logrado sumar cada vez más pasajeros al punto de que este año alcanzó el récord de los dos millones de viajantes en el año –entre arribos y partidas–, según lo informado por el Ministerio de Turismo.
Esto significó superar el récord de 2011, cuando pasaron por Carrasco poco más de 1,9 millones de personas. La pasajera que completó los dos millones fue recibida con una singular bienvenida por la ministra de Turismo, Liliam Kechichián, y por Diego Arrosa, CEO de Corporación América en Uruguay, grupo al que pertenece Puerta del Sur, concesionaria del Aeropuerto de Carrasco.
Esa pasajera, para su sorpresa, fue invitada por las autoridades –luego de pasar por Migraciones– a dejar su huella grabada en la terminal a modo de celebración. La homenajeada se llama Patricia Yelpo y venía en un vuelo procedente de Miami, Estados Unidos, ciudad en la que vive hace una década. Elije todos los años Uruguay para pasar sus vacaciones en familia. “Fue una sorpresa espectacular, no me la esperaba. El recibimiento fue una experiencia maravillosa. Me sentí muy feliz de ser parte de este hito histórico para el país”, aseveró.
“Festejamos este logro histórico de una de nuestras principales puertas de entrada de turismo al país. Uruguay está en uno de sus mejores momentos turísticos, con cifras históricas de visitantes. Ello no es fruto de la casualidad, es producto del trabajo mancomunado y profesional que se viene realizando desde el ámbito público y privado”, se congratuló la ministra Kechichián.
Por su parte, Arrosa destacó el esfuerzo que ha realizado el aeropuerto junto a las autoridades para consolidar a Uruguay como destino turístico. “Estamos orgullosos de este logro, que deja en evidencia la buena salud del turismo en el país, de cara a la temporada de verano”, afirmó.
En el Aeropuerto de Carrasco, que sufrió la desaparición de la aerolínea de bandera nacional Pluna –que lo utilizaba como hub regional–, a mediados de 2012 el transporte de pasajeros se había reducido en un 7%. Aunque para 2013, el Ministerio de Transporte y Obras Públicas (MTOP) declaraba que se había recuperado la actividad aeroportuaria de Uruguay al restituir la conectividad con la región y potenciar destinos más allá de la zona. Es así que se concretó el arribo de líneas aéreas como Air Europa y Air France, pese a que esta se encuentra a punto de marcharse.
En estos momentos, la principal terminal aérea del país está en camino de ser el primer aeropuerto en autoabastecerse completamente con energías renovables propias, con base en los planes de instalación de un parque de paneles fotovoltaicos, que generará entre tres y cuatro megavatios en cuatro hectáreas inmediatas al aeropuerto.
A lo largo de estos años, el aeropuerto ha incorporado –además de los servicios que son ampliamente superiores a los que ofrecía en la terminal vieja– una serie de tecnologías para comodidad del viajante y la rapidez en los trámites.
En ese sentido, extenderá este mes el sistema Easy Airport al área de partidas. Esta herramienta combina tecnología biométrica, pasarelas electrónicas y detección automática de movimiento en filas con sensores 3D, que permiten realizar el control migratorio en forma automática. La expectativa es lograr que la mayoría de los pasajeros realicen sus trámites migratorios en menos de 15 segundos.
La propuesta, que se aplica hace más de un año en el área de arribos y es desarrollada en conjunto con la Dirección Nacional de Migración, ya optimizó de forma notoria los tiempos de espera y trámites migratorios. Durante octubre, 28.323 personas ingresaron a Uruguay a través del aeropuerto de Carrasco utilizando las pasarelas electrónicas, lo que representa el 32% de los arribos. El sistema registró más de 200.000 pasajeros, entre argentinos, brasileños, chilenos, españoles y uruguayos, informaron El País y El Observador.
Antes de fin de año se duplicará la cantidad de pasarelas migratorias biométricas en el control de partidas y se ampliarán las actuales de arribos incorporando pasarelas adicionales. Las nacionalidades aceptadas en el proceso migratorio de arribos por pasarelas automatizadas biométricas fueron extendidas y se incorporaron a los ciudadanos de la Unión Europea y de Estados Unidos.
Este sistema no solo reduce los tiempos del trámite migratorio, sino que incrementa la seguridad al incorporar tecnología biométrica para garantizar la correcta identificación de los usuarios. Además, la terminal aérea tiene un sistema de gestión de filas, que utilizan sensores ópticos 3D para monitorear en tiempo real la cantidad de pasajeros en fila y el tiempo que demorarán en terminar su proceso migratorio y de seguridad.
Si bien la terminal uruguaya es pequeña y mueve “apenas” 2 millones de pasajeros al año –a modo de ejemplo, por Barajas en Madrid pasan 50,5 millones de personas en ese período; 25 veces más– cuenta con comodidades propias de un aeropuerto de primera línea, lo que contribuye a mantener en perfil alto una de las principales puertas de ingreso al país. Este aspecto es fundamental para la creciente industria turística.