La guía de educación sexual es “un material innecesario, que no aportará nada bueno”

La propuesta de actividades con cosquillas, masajes y abrazos entre los compañeros de clase en la escuela, como plantea la polémica guía actualizada de educación sexual del Consejo de Educación Inicial y Primaria (CEIP) –presentada el pasado 23 de julio–, ha despertado la movilización de padres y madres que se han manifestado en contra de esta publicación y que reclaman su retiro de las aulas.
Entre ellos, se encuentra el grupo con alcance a nivel nacional “A mis hijos no los tocan”, con una delegación en Paysandú que –al igual que en todo el territorio– se encuentra recolectando firmas para detener el avance de esta guía, que consideran nociva para los niños.
“Este movimiento surge de una práctica que se llama ‘cosquillas y besos’, la actividad número 10 de la guía. Donde los chicos tienen que abrazarse, varón con nena, tocarse las partes blandas y duras, hacerse cosquillitas. Todo muy erotizante. Por ese tipo de prácticas es que surge el movimiento ‘A mis hijos no los tocan’. Eso le dio nombre a la agrupación. Es nacional y se nos han unido también el grupo Todos por los Niños. Estamos en contra de esta guía, porque no es una guía sexual. En todo momento busca erotizar, manifestar el placer sexual, habla de género, lo que va en contra de los principios laicos de esta república. Estamos en contra de esta guía, no que haya una sana educación sexual”, explicó a EL TELEGRAFO Shirley Kautz, miembro de “A mis hijos no los tocan Paysandú”.
Con ella se encontraban otras dos integrantes de la sección sanducera del movimiento, Elsa Jesús y Daiana Valli. Jesús recordó que la educación uruguaya siempre transitó muy unida al papel de los padres y su participación, lo que no ocurrió con la aprobación de esta guía de educación sexual, que ya estaba en la vuelta desde 2006.
“Cuando se aprobó, empezamos a informarnos más, porque jamás se nos preguntó si estábamos de acuerdo. Educación sexual sí, pero nosotros estudiamos esto (por la guía) y no tiene nada de educación sexual”, insistió Jesús en esa línea.
El movimiento “A mis hijos no los tocan” se define como una agrupación de “padres y abuelos, familias y jóvenes” que se une “sin banderas políticas ni religiosas” para que “todos puedan participar y ser escuchados”, con el propósito de “defender” los “derechos no respetados y vulnerados mediante leyes inconstitucionales, que pretenden una colonización ideológica”. A su vez, buscan “ser un movimiento referente en la sociedad uruguaya, en defensa de los derechos de la familia”, como aseguran desde su fanpage de Facebook.
La guía de educación sexual de CEIP afirma, en la página 12, que el “sexo refiere a las características y diferencias genéticas, hormonales y anatómicas. Pero hay corrientes de pensamientos que también conciben el sexo como una construcción social”.
“Ahí meten la ideología de género y se nota lo tramposo que es esto. Después habla de genitalidad, la búsqueda de placer. Dice que esta búsqueda puede ser de uno solo, de dos o de varios. O sea, le van a decir a un niño: mirá, buscá el placer entre varios, mandate las orgías que está buenísimo, que está bárbaro. Le van a decir estas cosas a mentes no formadas”, subrayó Kautz. (Más información en edición impresa)