En el mercado local, la operativa de lanas fue reducida. “Algunos sectores de la demanda no validan aún los aumentos que se registraron en el exterior, mientras que otros, cautelosamente, continúan comprando a medida que la oferta va apareciendo”, señaló a EL TELEGRAFO José Luis Trifoglio.
El responsable del Departamento de Lanas de Zambrano y Cía. manifestó que “en este nuevo año, se continúan observando varios escenarios con las mismas características que a fines de 2017. Un sector de lanas finas y superfinas demandado, pero con muy poca disponibilidad; otro sector de lanas medias a finas con cierta demanda a precios interesantes y oferta reducida; otro sector de lanas medias a gruesas que aún no ha mostrado una demanda fortalecida frente a una mayor oferta y el sector de lanas muy gruesas y lanas de razas carniceras o sus cruzas, donde la demanda no aparece”. El operador entiende que es posible que, en las próximas semanas, “si el mercado internacional comienza a mostrar cierto grado de estabilidad por un período mayor, que valide las subas a través de nuevos pedidos del exterior se comenzaría a transitar un período de mayor flujo comercial, en especial en lanas medias y finas”.
EXPORTACIÓN
De acuerdo con la información proporcionada por la Dirección Nacional de Aduanas (DNA), las exportaciones de lana y productos de lana de Uruguay, durante 2017, generaron un ingreso de divisas al país de U$S 211.500.000, que representó un aumento de 1% con respecto al 2016.
En términos de volumen físico base sucia, las ventas al exterior de lana sucia, lavada y peinada crecieron 7,5%, al totalizar de 41 mkg. Sin embargo, las exportaciones de lana sucia cayeron 5,8% y la lana peinada 0,5%, mientras que las de lana lavada se incrementaron 42,5%. Durante el último año, esos tres rubros fueron a 35 destinos, entre ellos, China lideró las compras (52,1%), registrando un aumento en sus importaciones del 25,5%. En segundo lugar se ubicó Alemania, con un 13,7%, seguida de Italia, Turquía, Bulgaria, India y República Checa.
EXTERIOR
El mercado lanero australiano, después del tradicional receso de Navidad y fin de año, 2018 abrió con ofertas muy voluminosas, “pero con una demanda muy ávida por la fibra, principalmente por lanas finas y superfinas, provocando aumentos importantes en los valores de la mayoría (pero no en la totalidad) de las categorías de lana”.
En esta última semana, se percibió que el mercado comenzó a buscar cierto grado de equilibrio, registrando pequeños cambios con respecto al cierre semanal anterior, dependiendo de la moneda en que se analice. El Indicador de Mercado del Este (IME) subió tres centavos en comparación con el cierre de la semana pasada (0,2%) al ubicarse en U$S 14,34.
“Este fue el cierre semanal más alto de la actual zafra a la fecha y desde el pasado 14 de julio de 2011, utilizando los valores actualizados (de la serie histórica) con el nuevo método de cálculo del IME realizados por AWEX a principios de zafra, que permite realizar una comparación seria”, aclaró Trifoglio.
Al analizar las variaciones de precios con respecto al cierre de la semana anterior, “observamos que algunas categorías bajaron (19,5 a 21 y 25 a 28 micras), mientras que el resto de las descripciones se tonificaron entre 0,1% y hasta 3,3%.
La oferta semanal alcanzó los 54.350 fardos; de estos, se vendió el 93%. “Fue la mayor oferta semanal de la actual zafra a la fecha”. Según informó Australian Wool Exchange, los próximos remates se realizarán durante el 23 y 24 de enero, y se estima que la oferta será de 43.300 fardos.
Según algunos analistas, en la primera semana de ventas, “algunos operadores incrementaron sus compras por necesidad de cubrir embarques de negocios ya pactados, teniendo más en cuenta en el momento de la compra, el volumen que la calidad.
Sin embargo, durante esta semana, la demanda fue más selectiva y cauta, y se comenzaron a ver descuentos importantes en algunos lotes de lana ofertados a causa de la calidad”, dijo el analista.
