Con dos actos centrales a nivel nacional, en Paysandú y Montevideo, la Federación Nacional de Cooperativas de Viviendas por Ayuda Mutua (Fucvam) comienza hoy, a las 19.30, el año de movilizaciones anunciadas, a fin de obtener el repago de la tasa de interés al 2%, la exoneración del IVA en la compra de materiales –que hoy se aplica a las empresas– y la reconstrucción del Fondo Nacional de Vivienda con una sobretasa del Impuesto al Patrimonio.
El movimiento convoca hoy a la conmemoración de los 34 años de la recolección de 330.000 en un día contra la Ley de Propiedad Horizontal y recordará que el 17 de diciembre se cumplirá medio siglo de la Ley Nacional de Vivienda (Ley 13.708), que creó dicho fondo e impulsó a la creación de las cooperativas de viviendas. En Paysandú, se efectuará en la plaza Juan Pablo Terra.
REUNIÓN CON VÁZQUEZ
La presidenta de la dirección nacional, Alicia Maneiro, acompañada por el secretario general, Jorge Díaz, fueron recibidos por el presidente Tabaré Vázquez y la ministra de Vivienda, Eneida de León. En la oportunidad, plantearon los temas pendientes de una plataforma reivindicativa y se acordó la instalación de una mesa de diálogo a la que se unirá el Ministerio de Economía, a fin de debatir la necesidad de destinar recursos genuinos al fondo, tal como establece la ley redactada por el entonces diputado Juan Pablo Terra y aprobada en 1968.
El fondo financia la totalidad de los planes que se ejecutan desde el Ministerio y, si bien el plan quinquenal anunciado por De León asegura la construcción de 10.000 núcleos habitacionales, el movimiento necesitaría unas 14.000, ante un déficit habitacional que se mantiene fundamentalmente en los sectores populares.
A fines de 2017, el Parlamento transformó en ley el subsidio a la permanencia, planteado con la reglamentación de 2008, que a su vez elevó del 2 al 5,25% la tasa de interés en el repago de los préstamos.
El fondo recibe asignación presupuestal, sin embargo, la ley votada hace medio siglo se nutría de fondos propios, conformado por 1% de la masa salarial de los trabajadores y 1% del impuesto a las patronales, que se quitó durante la presidencia de Luis Alberto Lacalle. Durante la gestión de Jorge Batlle, dicho impuesto pasó a Rentas Generales y desde la reforma tributaria de la primera presidencia de Vázquez no se especifican los fondos destinados a vivienda que depende de las rendiciones de cuentas.
El proyecto de la federación propone que el fondo no sea “inferior a la suma anual del 2% de los ingresos del trabajo en relación de dependencia o no”, cuyo valor “se definirá al inicio del período presupuestal y se ajustará cada año por la evolución del Índice Medio de Salarios”. Con esta iniciativa, se pretende reconstruir el fondo con el equivalente al 2% de la masa salarial, sin la creación de nuevos impuestos y establece una política a largo plazo para abatir el déficit habitacional. La propuesta señala que los recursos serán financiados por una tasa del Impuesto al Patrimonio de 50%, sobre la tasa actual y si esta queda por debajo del valor asignado al fondo, se completará desde Rentas Generales.
La instancia de diálogo será convocada por la ministra De León, que establecerá contactos con Economía, a fin de asignar delegados a la mesa. En la plataforma, Fucvam presenta propuestas para solucionar las situaciones de violencia doméstica hacia las mujeres cooperativistas y la titularidad del bien, a través de un acuerdo con el Ministerio de Vivienda que financia el capital correspondiente al agresor, que debe irse de la casa, al tiempo que plantea un ingreso de similares características a las víctimas que tengan que abandonar su hogar.
LA JORNADA DEL 26
El actual coordinador del Programa de Vivienda y Hábitat de la oenegé sueca We Effect en América Latina, Gustavo González, exsecretario general de la dirección nacional de Fucvam, recopiló la jornada desarrollada el 26 de febrero de 1984 en su último libro, presentado a fines del año pasado.
Recordó a EL TELEGRAFO que “pasé toda la madrugada en una radio, junto a Fernando Nopitsch, respondiendo las preguntas de la gente y lo que significaba votar por el no de Fucvam”. Durante ese día, “se recogieron 330.000 firmas contra la propiedad horizontal que nos quería imponer la dictadura y me pareció que no debe quedar en el debe la documentación de una gesta tan importante para Fucvam”. González recordó la huelga de pagos “contra un aumento arbitrario resuelto por el gobierno de facto en noviembre de 1983. Hicimos un estudio y vimos que le pusieron un costo político a la Unidad Reajustable, antes que el económico y, a partir de ahí, declaramos que no íbamos a pagar ese 15%”.
En diciembre de ese mismo año, el gobierno promulgó la Ley 15.501 o Ley de Propiedad Horizontal, donde “se pretendía que las cooperativas dejáramos de ser de uso y goce, de usuarios y propiedad colectiva y pasáramos a la propiedad individual que destruía el cooperativismo como tal. El entonces asesor del centro cooperativista uruguayo, Helois Sarthou, nos propuso la recolección de firmas para instalar un referéndum. Eso marcó un antes y un después del movimiento”, aseguró.
