Agroquímicos en peces son “indicador del proceso de contaminación”, afirmó Heinzen

Si bien la información sobre la presencia de residuos de plaguicidas en peces del río Uruguay fue presentada en nota de tapa por EL TELEGRAFO en su edición del 22 de noviembre de 2017, la reciente publicación de la revista científica Science of the Total Environment de ese informe pone nuevamente en el tapete la cuestión de la calidad del agua de ríos y arroyos y la tierra uruguaya, con la presencia cada vez mayor de productos químicos utilizados para la agropecuaria, con efectos claros en el medioambiente.
“En el caso de los peces, se analizaron varias especies, tanto migratorias (boga, dorado y sábalo) como otras de comportamiento más localizado, como bagre, tararira y vieja del agua. En todos los casos, se tomó una muestra de carne de animales vivos. En uno de los peces, un sábalo, se encontraron trazas de 21 sustancias distintas”, publicábamos en la página 3 del miércoles 22 de noviembre de 2017. El 96% de todos los peces presentaron residuos de agroquímicos en sus tejidos musculares.
Uno de los profesionales que realizó aquel informe fue el sanducero Horacio Heinzen, químico farmacéutico y doctor en Química por la Universidad de Göttingen de Alemania. Actualmente, es profesor catedrático de Farmacognosia y Productos Naturales en Facultad de Química de la UdelaR.
CLAROS INDICADORES
DEL PROCESO
Consultado por EL TELEGRAFO sobre el informe publicado, dijo a modo de resumen que “estos son claros indicadores de un proceso de contaminación de los ríos a tener en cuenta”. No obstante, Heinzen aclaró que le preocupa “el uso que se pueda dar a esta información, porque es muy fácil ponerla en blanco y negro cuando lo que uno ve es una gama infinita de grises. Es mucha responsabilidad cómo se da una información de este tipo, porque se puede crear una alarma pública sin sentido”.
Sobre cuánto puede impactar el grado de contaminación, el químico farmacéutico dijo que “depende si es visto desde un contexto de contaminación ambiental o de contaminación de alimentos. En el caso de los alimentos, los niveles que se encontraron en los peces son muy bajitos, están casi en los límites inferiores de detección de los equipos. En su mayoría, son 10 veces menores al límite estándar que se acepta para los alimentos que es 10 microgramos por kilo de alimento”.
El profesional detalló que “de acuerdo con las recomendaciones de la Organización Mundial de la Salud (OMS) para que la dosis tuviese algún significado toxicológico –es decir, que estuviera por encima del límite máximo de residuos permitido– habría que comer 4.200 kilos de patí, por ejemplo. A los efectos de la contaminación en los alimentos y en las muestras que analizamos, no entraña ningún riesgo para la salud humana. Eso es lo primero que vale la pena aclarar”. A modo de ejemplo, el consumo promedio de pescado en Uruguay es de 10 kg por año –mayormente de pescado de mar–. Los 4.200 kg de referencia equivale al consumo de 420 años. (Más información en edición impresa)