Unas tres mil personas se sumaron a la Tribuna Este del Estadio Artigas para presenciar el miércoles el partido entre los combinados Sub 17 de Paysandú y Florida, la primera final de la Copa Nacional de Selecciones.
La entrada gratuita para los hinchas locales fue sin dudas punto importante para ello, más allá de lo que el equipo de Martín Parodi estaba jugándose. Los hinchas visitantes fueron muy pocos. Y se les destinó la Tribuna Norte, a un costo de $ 200 el boleto. Algunos floridenses optaron por darse media vuelta y ubicarse, calladamente, en la Tribuna Este. Otros sacaron el dinero mascando bronca.
Hace mucho que el Estadio no recibía una final del Interior. Intentó lucir de la mejor manera, pero está muy lejos de ser aquel que se inauguró en 1995. A unos 23 años de recibir la Copa América, el hincha local se acostumbró a verlo de esta manera, pero no el visitante, que queda asombrado. Mientras la Tribuna Este estaba colmada de hinchas, la Oeste solo muestra un estado de abandono importante. Con hundimientos y, al igual que los codos que alguna vez recibieron a los funcionarios municipales, lleno de yuyos.
Y ni hablar los baños de la Tribuna Norte, donde se cobró $ 200 la entrada. Los sanitarios sin separación, los lavatorios que vuelcan el agua en el piso al estar rotos los sifones.
Está claro que es complicadísimo sumarle un par de millones de dólares para dejarlo en óptimas condiciones. Pero al menos la comuna debería invertir para realizar un mantenimiento que disimule lo que despierta la sensación de estado de abandono.
