El presidente de la Administración de las Obras Sanitarias del Estado (OSE) anunció que ayer se abrieron las ofertas para una licitación que busca cambiar o reparar las tuberías de agua potable que tienen pérdidas por problemas de presión, cuyo trabajo comenzaría “en unos seis meses” y también buscará otras pérdidas comerciales de agua, como los contadores que pueden funcionar mal o encontrar a quienes pueden tener conexiones clandestinas del agua potable. El jefe regional de OSE, Juan José Silva, detalló por su parte que la inversión es del orden de los 118 millones de pesos, unos cuatro millones de dólares.
Machado definió este programa como RANC (Reducción de Agua No Contabilizada), y que “es para trabajar con las pérdidas de agua potable”.
“Se trabaja por área, por sector, donde se hace un estudio del diseño hidráulico de la red para principalmente bajar presiones en la noche, se ponen reguladores y se estudia en qué condiciones está esa infraestructura. Donde la tubería ya cumplió su vida útil se cambia, y además se hace toda una revisión de los medidores, viviendas que estén con conexiones clandestinas o en situación irregular, todo ese trabajo es para mejorar el agua no contabilizada, que no es solo la perdida por roturas, sino que también hay pérdidas comerciales”. Machado estuvo ayer en Paysandú reuniéndose con el intendente Guillermo Caraballo y luego fue a Guichón, para participar en una asamblea pública invitado por el grupo Colectivo de Guichón por los Bienes Naturales. Hoy visitarán con el intendente el barrio Chaplin, donde se harán trabajos de saneamiento.
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