Trabajar en el libro “me enseñó muchas cosas”

A pocos días del Mundial, cuando el fútbol comienza a ser prácticamente la única conversación entre los uruguayos, la propuesta era una pegada.
Pero sorprendió a todos: el libro “Maestro, el legado de Tabárez” vendió rápidamente los 4.000 ejemplares de la primera edición, y la segunda sale como pan caliente.
El interés ha sido enorme. Al punto que sus autores, Luis Inzaurralde y Jorge Señorans, no solo realizaron la presentación en Montevideo (el técnico de la selección uruguaya pidió poder estar presente) con gran repercusión, sino que han recorrido varios puntos del Interior con el mismo objetivo. Y también hubo eco desde el exterior.
“La idea nació hace cuatro años, pero por diferentes motivos no habíamos podido a vanzar. Y hace dos años arrancamos. No pensamos en esta repercusión. Sí teníamos expectativas de que pudiera andar bien por el contenido, pero nunca que se agotara tan rápido la primera edición. O de la repercusión mediática que se tuvo en el exterior”, remarcó Señorans, que presentó la obra en La Posta del Libro.
¿Cuál es la explicación para tanta repercusión? Para el periodista “el motivo es que el personaje en cuestión se ha ganado una consideración a nivel mundial, y la selección ha concitado la atracción en el exterior, sobre todo por sus figuras. Hay un hecho que se destaca: cuando Uruguay fue a Colombia a jugar en Barranquilla, la gente recibió a Tabárez con aplausos”.
Señorans e Inzaurralde no dejan lugar a dudas: Tabárez refundó la selección uruguaya.
“Queríamos dejar por escrito cómo Tabárez generó la refundación de la selección. Cuáles fueron los pilares fundamentales en los que se basó. Y siempre dijo que quería que cuando llegara un nuevo técnico tuviera un material de consulta; no para imitarlo sino para que cotejara lo que él había hecho. Así se nos prendió la lamparita justamente de generar ese material de consulta. Así comenzó a caminar la idea”, remarcó Señorans.
Cada uno tiene su pensamiento con respecto a este proceso. Lo tendrían también los periodistas en cuestión. Por eso la pregunta fue si cambió en algo la percepción durante el trabajo que terminó con la edición del material.
“Personalmente me enseñó muchas cosas. Aprendí mucho. Por ahí antes miraba el partido, y con esto aprendí a mirar un poco más allá, a entender el por qué de determinadas cosas, que finalmente tienen su razón de ser”, reflexionó el periodista, que tiró como ejemplo comprender más las citaciones, “que a veces eran criticadas, porque se dice que siempre vienen los mismos”.
“Pude comenzar a entender que hay roles en todo esto, que es importante, y cada uno aporta desde el lugar que le toca. Y pude ver cómo se profesionalizó la gestión, hasta en los pequeños detalles, que acá no existían. Como jugar amistosos en fecha FIFA, que los futbolistas viajen como corresponde, cómo se arregló el complejo de la AUF”, afirmó.
El autor confirma el profesionalismo con el que se maneja el entrenador de la Celeste. “Por ahí al principio te choca, pero con el paso del tiempo no solo lo aprendés sino que lo comprendés. Las condiciones son iguales para todos. Y nosotros tuvimos que hacer el libro en las mismas condiciones que los demás”, señaló.
El libro recorre todos los aspectos de la selección desde que llegó Tabárez en 2006. Qué fue lo que cambió, cuál fue el proyecto del que no se movió, la comunión con los jugadores y el respaldo de los dirigentes.
Porque en su momento, “era fácil sacarlo a Tabárez”. Por ejemplo “en la Copa América de 2007 su continuidad estuvo en duda porque algunos entendían que habían sucedido algunas cosas que ponían en duda su tarea. El tema es que con los resultados y el trabajo que realizó todo se encarriló”.
Para el coautor de “Maestro”, el legado de Tabárez es mucho más que resultados. “Por ejemplo cuando ves que la selección mayor se nutre de los futbolistas que pasaron por las juveniles, quiere decir que es producto de un proyecto, de la realidad. Y que esos jugadores que suben tienen la misma línea que los que se fueron”, explica.
Y remarcó que Tabárez “logró que el jugador esté más allá de la pelota. Como toda esta movida que se generó de los jugadores, que hayan traído la oferta de la camiseta de la selección dejando en evidencia a la clase dirigente cuando incluso la oferta superior ganó por un voto”.
Y el hecho de que “el propio Tabárez se haya puesto del lado de los jugadores en la pelea por sus derechos, también marca su postura. Tranquilamente podría haber dicho que nada tenía que ver con el tema y podría haber seguido dando las notas a Tenfield”.
El libro aporta muchos datos. Leerlo es prácticamente estar dentro del ámbito de la selección.
Y la gran pregunta es qué sucederá cuando Tabárez no esté. “Es difícil saber qué va a pasar. Pero va a ser muy difícil que se pueda romper esto más allá de que se dependa mucho de los dirigentes de turno. Y muchas veces se le tiró piedras a esta idea, diciendo que era muy caro y demás, pero la realidad es que todos han sacado provecho de esto”, remarcó.