Un Mini Morris de 1980

Un coche pequeño, rápido, de mucha calidad: así se considera al automóvil Mini Morris. En una encuesta internacional realizada en su momento para determinar el automóvil del siglo pasado más influyente en todo el mundo, el Mini quedó segundo, siendo superado únicamente por el Ford T.
El Mini es un pequeño automóvil del segmento A, producido por la British Motor Company y sus empresas sucesoras entre 1959 y el 2000. Este automóvil, el más popular de los fabricados en Gran Bretaña, fue entonces reemplazado por el nuevo Mini lanzado en 2001.
El original es considerado un ícono de los años sesenta y su distribución ahorrativa de espacio con tracción delantera y motor transversal influyó sobre una generación de fabricantes de automóviles. El Mini se fabricó en versiones de varias carrocerías, una cupé de dos puertas, una versión familiar, una furgoneta, la pick-up, un modelo playero sin puertas y el moke, que se trataba de una variante todoterreno.
Desde el punto de vista deportivo, el Mini Morris cumplió una destacada actuación a través de los años y la victoria en el Rally de Montecarlo de 1965 está entre sus mejores performances. En una época dominada por los monstruos de ocho y seis cilindros de varios litros de desplazamiento, el Mini hizo historia en las carreras al superar todos esos cientos de caballos de fuerza con su agilidad extraordinaria y maniobrabilidad sin igual.
Estas características las obtenía por su bajo peso –que permite lucir cada “caballito” de su diminuto motor–, caja de cuatro cambios muy rápida, suspensión baja y rígida, y proporciones de carrocería casi cuadradas. El más endiablado era el equipado por Cooper, un verdadero misil. Era algo así como un kart potenciado, que se escabullía entre los Jaguar y similares en las pistas europeas, sin que pudieran darle alcance.
ENTRE NOSOTROS
Aquí en Paysandú se encuentra este automóvil Mini Morris de 1980 que hoy presentamos. La versión dos puertas, pintada de rojo brillante, con dos bandas blancas paralelas en el capó, con parrilla frontal y dos faros en los extremos, con el amplio parabrisas y la no menos grande luneta trasera, los dos grandes cristales laterales, conformando un todo compacto y muy atractivo.
Pertenece a Marcelino Feijoo, quien manifestó que lo tiene “hace alrededor de 15 años. Con él competí en seis ediciones del Gran Premio 19 Capitales Histórico y en dos Gran Premio Argentinos”. El auto se encuentra en excelente estado mecánico y de presentación, impulsado por el motor de cuatro cilindros de 998 cc original, confiable, como lo demuestran sus participaciones en pruebas exigentes. En el interior, las dos butacas delanteras y el asiento trasero.
Un vehículo que se mantiene en perfecto estado, un referente de una máquina consagrada a nivel mundial, como dijo alguien “simpático, pequeño y rendidor”. Más que eso por cierto, ya un ícono del automovilismo mundial.
APUNTES TÉCNICOS
Motor: de cuatro cilindros, 998 cc, que eroga 43 hp.
Caja de cambios: de cuatro velocidades.
Frenos: hidráulicos.
Suspensión: neumática con conos de goma (no usa elásticos ni resortes).