Maxi Gómez sigue siendo objeto de reconocimientos tras lo que fuera su primera participación mundialista vistiendo la camiseta de Uruguay.
Ahora fue el turno de que su exclub, Litoral, lo homenajeara en el Parque Agustín Rivabén, que gracias al pase del delantero al Celta e Vigo luce de una manera espectacular.
Los dirigentes del decano del fútbol sanducero apostaron a invertir el dinero que correspondió a la institución por el derecho de formación en las instalaciones del club. Y la realidad es que hoy parece otro campo deportivo.
Gómez fue cálidamente recibido a su casa por parte de directivos, allegados y de simpatizantes.
El goleador, que hace pocos días organizara un asado para más de 60 personas del barrio donde vive su familia, se mostró emocionado y agradecido por el homenaje recibido.
Además de una camiseta con el número 20, con el nombre del jugador en la espalda, Gómez recibió una plaqueta que reza: “En la vida triunfa el que persevera, el que se esmera, el que persiste, el que sabe que no es fácil pero continúa insistiendo, si se cansa descansa y continúa”.
Gómez, que defendió la camiseta rojinegra, fue traspasado luego a Defensor Sporting, desde donde dio el salto a España. En el Celta de Vigo rápidamente se adaptó a un fútbol totalmente diferente, anotando 17 goles.
Su rendimiento permitió que fuera convocado para vestir la camiseta de Uruguay en el Mundial de Rusia 2018.