A finales de mayo, el senador Jorge Larrañaga impulsó una campaña de recolección de firmas para realizar un plebiscito de reforma constitucional, denominada “Vivir sin miedo”. A grande rasgos, el sector Alianza Nacional promueve medidas como la creación de una guardia nacional que habilitaría a los militares a colaborar con la Policía en tareas de seguridad interna, la posibilidad de realizar allanamientos nocturnos por la Policía, el establecimiento de prisión perpetua revisable para delitos de extrema gravedad y el cumplimiento efectivo de la pena para delitos graves, y eliminar así las salidas anticipadas por buena conducta u otros factores atenuantes.
Para que se pueda llevar adelante el plebiscito, la campaña debe obtener el apoyo del 10% de los habilitados para votar, lo que serían unas 270.000 firmas. En el “Informe de opinión pública: Nivel de aprobación de campaña ‘Vivir sin miedo’”, realizado por Opción Consultores, que fue efectuado junio, se obtuvo como resultado que el 4% de los consultados respondió haber firmado, en tanto el 36% dijo que probablemente firmaría.
De estas respuestas, el estudio destaca que si son “necesarias las firmas de un 10% de los electores habilitados para concretar el plebiscito, los datos presentados sugieren un escenario favorable para los impulsores de la campaña. Bastaría que una cuarta o quinta parte de los electores que creen que firmarán lo hagan para que el plebiscito se concrete”. El 21% se mostró en contra y respondió que cree que no firmará, mientras que el 18% de los uruguayos declaró que no conoce la campaña.
DIFERENCIA DEL ELECTORADO
Según la intención de voto, hay una clara diferencia entre el electorado que sufragará a favor del Frente Amplio con respecto a los votantes de otros partidos. Entre los votantes frentistas, quienes declararon que no firmarán la campaña son casi cuatro veces más que los que creen que firmarán o ya firmaron (48% ante un 10%).
Entre la oposición es similar la respuesta sin depender del partido al que votarían, si se toman como referencia el Partido Nacional, Colorado y el Partido de la Gente. Seis de cada 10 de estos electores apoya la campaña (compuesto por una minoría que ya firmó y una mayoría que cree que firmará) y solo entre un 6% (PN), un 8% (PG) y un 12% (PC) se muestra proclive a no firmar.
Asimismo, hay una gran diferencia en cuanto a las edades. Entre la población de 18 a 34 años, un 35% no conoce la campaña, en tanto que un 27% dijo que ya firmó o que firmará, mientras que el 17% no firmará. A medida que sube la franja etaria aumenta la proclividad a firmar.
Entre la población que se ubica entre 35 y 59 años, un 45% dijo que ya firmó o que firmaría, en tanto un 23% declaró que no lo haría, mientras que un 11% desconoce la campaña. En las personas mayores de 60 años, un 51% dijo que firmaría o ya firmó, mientras que un 25% no firmará y solamente un 6% señaló desconocer la campaña.
MÁS DE LA MITAD CREE
QUE LOS DELITOS BAJARÁN
Un 59% de los encuestados cree que con las medidas que se pretenden imponer –entre las que se encuentra que los militares participen en tareas policiales, incrementar penas para delitos graves y permitir allanamientos nocturnos en hogares– bajarían los delitos. Un 28%, en tanto, entiende que se mantendrían, un 5% cree que crecerán, mientras que un 8% prefirió no responder.
El informe de Opción Consultores concluye que “la campaña de firmas ‘Vivir sin miedo’ cuenta hoy con un 40% de potenciales adherentes y un rechazo del 21%, mientras el segmento de quienes no han tomado posición alcanza el 39% (sumando a quienes no saben si firmarán y a quienes no conocían la campaña al momento de la encuesta). Con estos números, el escenario más probable es el de realización de un plebiscito de reforma constitucional en 2019, dado que es suficiente con contar con un 10% de firmas del padrón de ciudadanos habilitados”.
