La selección uruguaya de fútbol entrenó anoche en Houston por primera vez, de cara al partido amistoso del viernes ante México, en lo que será la primera presentación luego del Mundial de Rusia.
Los orientados por al menos este compromiso por Fabián Coito sumarán hoy a Luis Suárez, que llegará desde España, por lo que el técnico podrá trabajar con el grupo completo, ya pensando en definir el equipo que será titular.
La mala nueva fue la baja de Giorgian De Arrascaeta, que retornaba anoche a Brasil. El jugador del Cruzeiro sufrió el domingo dolor en el muslo izquierdo, y al arribar a Houston el cuerpo médico de la selección ordenó una serie de estudios. El resultado: desgarro grado 1 de bíceps femoral izquierdo y edema intersticial.
Anoche, Coito convocó al sanducero Nicolás Lodeiro, que había sido reservado inicialmente pero no confirmado para integrar el plantel.
Coito tendrá solo dos días para preparar el compromiso amistoso ante los aztecas, que se disputará el viernes desde las 23.05 de nuestro país.
La Celeste está alojada en el hotel Westin Galleria, de cara al compromiso a disputarse en el NGR Stadium de la ciudad de Houston. Vale recordar que en octubre Uruguay se medirá ante Corea del Sur y Japón, en ambos casos de visita, y que en noviembre se las verá ante el campeón del mundo, Francia, en París.
Cambian Colombia y Paraguay
Mientras Paraguay confirmó el lunes que el colombiano Juan Carlos Osorio será el nuevo técnico de la selección albirroja en sustitución de Francisco Arce, y que el gran objetivo planteado es clasificar al Mundial de Catar, en Colombia fue sorpresa ayer la renuncia del técnico argentino José Pekerman.
Tras seis años en el cargo, Pekerman decidió dar un paso al costado de la selección al entender que se ha cumplido un ciclo, tras haber estado presente en los últimos dos Mundiales.
Pekerman dijo que está dispuesto a colaborar desde afuera con el fútbol colombiano, y agregó que “no hubo ningún tipo de condicionamientos” para su salida, aunque se negó a dar las razones que lo llevaron a tomar la decisión de alejarse de la selección cafetera.