Un grupo de padres de alumnos de la escuela ubicada en José Pedro Varela y Francisco Bicudo, con un turno matutino de la 99 y vespertino de la 26 donde concurren en total unos 800 alumnos, se concentraron ayer en la explanada frente al local escolar, donde expusieron su preocupación ante la falta de una instalación eléctrica completa, desde que en febrero pasado la empresa que estaba trabajando dio quiebra y dejó el trabajo sin terminar. Ahora se trabajará en otra instalación provisoria para instalar tomacorrientes, anunció a EL TELEGRAFO la inspectora departamental de Primaria, Liliana Pereira, hasta que se adjudiquen las obras a la nueva empresa. “Hoy a las 15:30 hubo una nueva reunión en la escuela de la arquitecta y la inspectora de zona con los padres”, afirmó.
Ante las primeras jornadas de calor, y aunque no se hayan registrado picos altos, un grupo de padres reclamó por la falta de enchufes en los salones para poner ventiladores, y la imposibilidad de hacer funcionar los equipos de aire acondicionado –instalados y hasta ahora no usados– por las limitaciones de la actual red eléctrica.
Pereira dijo que ayer “estuve por segunda vez con los padres, y lo que le hice ver es que esa instalación provisoria hace que se superpongan dos recursos (económicos) importantes, porque una vez que la empresa empiece a trabajar toda esa instalación provisoria se tiene que descartar, y es material y tiempo que se invierte. No es que los niños no se lo merezcan, y tienen el derecho, pero debemos buscar equilibrar los recursos”. Destacó que pese a esto, “se instaló la parte de la cocina para que los niños cuenten con el comedor y en el aula siempre hubo luz eléctrica, aunque no hubo tomacorrientes, la llevamos bien durante el año, pero ahora al aproximarse el calor despierta malestar en los padres”.
LA EMPRESA ANTERIOR QUEBRÓ
El problema, según se indicó, estaba siendo resuelto desde el año pasado con la colocación de un nuevo servicio eléctrico, que suplía al anterior, viejo y con poca capacidad para la demanda. Sin embargo, la empresa que estaba trabajando cerró por quiebra, y dejó el trabajo sin terminar. La inspectora departamental dijo que al constatarse este problema, hubo que hacer varios trámites, así como participar a la Justicia, como corresponde en estos casos. Paralelamente, y una vez que se estableció que la empresa no iba a continuar las obras adjudicadas en 2016, se hizo una nueva licitación abreviada del Consejo Directivo Central de la Administración Nacional de Educación Pública, identificada en la Agencia de compras y contrataciones del Estado con el número 21/2018.
Se trata de “Obras de culminación de la instalación eléctrica y sobretecho de chapa, baño accesible y rampa, en el local de la Escuela N° 26/99 de Paysandú”, que tuvo fecha límite de recepción de ofertas el 24 de julio pasado, donde se presentaron siete empresas, Mauricio Enrique Areta Devincenzi; Custodio Construcciones SRL; Electricidad Durazno SRL; Espetix SA; Obranir SA; O.R.M. Sociedad de Responsabilidad Limitada y Samel Ingeniería y Construcción SRL. Ahora las propuestas están siendo analizadas por el Tribunal de Cuentas, según afirmó la inspectora Pereira.
OBJETO DE LAS OBRAS
La licitación no es solamente para la instalación de los cables que conducen electricidad, sino que implica otras obras. El llamado oficial detalla que se debe hacer la “culminación de obra inconclusa de sustitución de tejas existentes por sobretecho de chapas en el sector más antiguo de la escuela y sustitución total de la instalación eléctrica”, y también “construcción de dos rampas y baño accesible”, para lo cual se deberá desmantelar una batería de baños clausurada, para transformarlo en baño accesible, y todo esto en un plazo de 90 días de trabajo efectivo, que pueden ser más días calendario según si llueve o hay otros inconvenientes.
